El veterinario valdiviano y vocero del movimiento ciudadano Acción por los Cisnes, Daniel Boroschek, denunció que siguen apareciendo cisnes de cuello negro muertos en el Santuario de la Naturaleza Carlos Anwandter del río Cruces y criticó a la Comisión Regional del Medio Ambiente (Corema) de la Décima Región por la inminente aprobación a la Planta Valdivia de Celulosa Arauco y Constitución (Celco) de incrementar su producción a 550 mil toneladas, porque el humedal del río Cruces «evidentemente no se está recuperando», dijo.
El profesional valdiviano señaló que a su consulta llegan aves muertas en condiciones fisiológicas deplorables lo que indica que el luchecillo no registra recuperación alguna, tal como señala un informe de la Corporación Nacional Forestal (Conaf).
Boroschek explicó que las nuevas oleadas de aves muertas se deberían a que hay cisnes que llegan al santuario desde otras zonas sin saber del desastre ambiental ocurrido en Valdivia desde el año 2004, ni del tipo de contaminación existente.
«Son aves que habrían migrado antes del 2003, viajaron con su pareja a su antiguo hogar, llegaron con sus últimas energías y se encontraron que no había alimento», explicó.
«Va a haber una segunda o tercera mortandad», sentenció el veterinario. «El santuario se está transformando en un trampa mortal porque los cisnes que vuelven no saben que el humedal no tiene alimento. Esto es grave».
«DECISIÓN DE LA COREMA ES ILÓGICA»
Para el profesional, es «inconcebible» que los miembros de la Corema autoricen a Celco a aumentar al 100 % su capacidad de producción que actualmente opera al 80% debido a que la misma autoridad determinó en mayo del año pasado reducir su volumen de producción.
Cabe recordar que la empresa fue sindicada por un informe científico de la Universidad Austral, encargado por la misma Conama, como la principal responsable de la contaminación del río Cruces y el santuario de la naturaleza, aportando el 92 por ciento de las aguas no deseadas al curso de agua.
«Celco estaría cumpliendo con las exigencias ambientales impuestas a la Planta Valdivia. Eso no es así porque el humedal no se recupera. Además, el plan de recuperación del santuario no ha producido ningún efecto. Hasta el momento no he notado que sirva», dijo.
«El gobierno por un lado tiene organismos que dicen que el santuario no se recupera y por el otro lado dice sigamos botando basura a un río que no se recupera. Es como tener doble personalidad», finalizó el veterinario.
De aprobarse el aumento de la producción de Celco, la empresa nuevamente vertería 77 millones de litros de riles diariamente al río Cruces.