Como «impresentable» calificó la organización de conservación marina Oceana, la resolución del Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) de Coquimbo, que recomendó aprobar el proyecto minero portuario Dominga en la comuna de La Higuera.
La organización acusó que «a pesar de las ilegalidades del proceso de evaluación ambiental, y que fueron denunciadas por diversos organismos, la autoridad consideró que el proyecto igualmente cumplió con la normativa y subsanó los errores, omisiones e inexactitudes detectadas durante la tramitación ambiental».
“Es impresentable que el SEA recomiende aprobar un proyecto que desde un inicio no entregó información relevante o esencial para evaluar correctamente el impacto que tendría sobre un ecosistema marino de características únicas”, denunció Liesbeth Van der Meer, Directora Ejecutiva de Oceana Chile.
En ese sentido agregó que “le hicimos saber al SEA las ilegalidades en las que han incurrido a lo largo del proceso ambiental y los incuantificables impactos que tendría el proyecto, pero nada de esto ha sido tomado en cuenta”, añadió la directora.
Oceana denunció algunas de las ilegalidades en que se habría incurrido durante la evaluación ambiental de Dominga. En primer lugar, señaló que el SEA ha permitido continuar adelante con un proyecto que no cuenta con toda la información necesaria y suficiente para ser evaluado, e incluso se le dio la oportunidad al titular de presentar cuatro adendas al proyecto, sin una justificación para ello.
Pero, además, no se han considerado adecuadamente las observaciones de la ciudadanía, tampoco las de los propios servicios públicos, siendo lo más grave el hecho que el SEA haya desestimado las observaciones de CONAF relativas a la protección de la flora y fauna de la Reserva Nacional Pingüino de Humboldt.
“Nos preocupa enormemente esta situación, no sólo el Estado de Chile y la institucionalidad incumplen con sus obligaciones de proteger la biodiversidad y el patrimonio de todos, sino que además desautoriza a los pocos que intentan efectivamente cumplir con su deber, como es el caso de CONAF”, señaló Van der Meer.
El proyecto considera la construcción de dos minas a rajo abierto para la extracción anual de 12 millones de toneladas de hierro y 150 mil toneladas de concentrado de cobre en sólo 22 años de vida útil.
Además, incluye un puerto de embarque que se ubicaría a 10 kilómetros del puerto Cruz Grande de CAP. Ambas industrias estarían cerca de las reservas marinas Islas Choros y Damas e Isla Chañaral, y de la Reserva Nacional Pingüino de Humboldt, donde se encuentra alrededor del 80% de la población mundial de esta especie.
Asimismo, es zona de reproducción, alimentación y migración de animales como el chungungo, el pato yunco, las ballenas azul y fin, todos en peligro de extinción.
La recomendación del SEA de aprobar el proyecto no es la etapa final del proceso. En la siguiente, la Comisión de Evaluación Ambiental de la región de Coquimbo, compuesta por el Intendente regional y secretarios regionales ministeriales de varias carteras, deberá analizar los antecedentes y decidir si aprobar o rechazar la Resolución de Calificación Ambiental.
“Esperamos que la Comisión Evaluadora se dé cuenta de los graves errores en los que incurrió el Servicio de Evaluación Ambiental de Coquimbo y del daño irreparable que significaría aprobar un proyecto como este. Estamos convencidos y lo hemos comprobado por rigurosos análisis y reportes, que el proyecto minero portuario Dominga debe ser rechazado”, finalizó Van der Meer.
A esto se suma la reciente denuncia de Radio Biobío, que señala que el ex presidente Sebastián Piñera y su familia, quien bajó el proyecto de Barrancones, eran socios de Minera Andes Iron cuando Dominga comenzó a gestarse en 2009 y que se ubicaría en la misma zona de la termoeléctrica, agregando una nueva arista al ya cuestionado proyecto.