Científicos del clima están advirtiendo que la amenaza del calentamiento global podría ser aún más peligrosa de lo que se pensaba, sugiriendo que las «tormentas asesinas», el aumento del nivel del mar y la «desintegración» de grandes partes de las capas polares podrían ocurrir más pronto de lo esperado.
El informe que contiene estas conclusiones lleva por nombre Ice Melt, Sea Level Rise and Superstorms, y argumenta que al ritmo actual de quema de combustibles fósiles y emisiones de gases invernadero, los humanos estamos induciendo un gran cambio climático que podría llevar a la humanidad a «un punto sin retorno».
«Estamos en peligro de entregarles a los jóvenes una situación que está fuera de nuestro control«, dice el autor del artículo, James E. Hansen, científico experto en clima retirado de la NASA y director de la Universidad de Columbia.
Es de general acuerdo entre los científicos climáticos que los niveles del mar se elevarán de entre 6 a 9 metros luego del derretimiento de los hielos, lo que otros científicos calculan que tomaría siglos.
Pero el mencionado informe, publicado en la revista Atmospheric Chemistry and Physics, dice que estos niveles se alcanzarán dentro de 50 años.
«Esto significaría una pérdida de la mayoría de las ciudades grandes y sus historias», dice Hansen en un video en que explica estudio, que fue realizado con otros 18 autores, quienes creen que el proceso de aumento del nivel del mar será acelerado luego de que las aguas dulces del derretimiento de los hielos formen una capa en el océano.
Esta capa evita que las corrientes distribuyan las aguas más cálidas y que el calor se escape hacia la atmósfera. Las aguas más cálidas luego seguirán derritiendo partes de las calotas de hielo que yacen por debajo del nivel del mar.
El informe basa su evidencia en las tormentas que se desataron hace 120.000 años, cuando la temperatura de la Tierra sólo estaba levemente más alta que ahora.
Es por una de aquellas tormentas que el Dr Hansen dice que un enorme peñasco encontró su lugar hacia un borde costero en las Bahamas luego de haber sido arrojado por olas gigantes, informa The Independent.
Traducción, CCV, El Ciudadano