La Primera Sala de Febrero de la Corte Suprema -integrada por los ministros Patricio Valdés, Pedro Pierry, Guillermo Silva, Rosa María Maggi y Juan Fuentes- resolvió que el Segundo Tribunal Ambiental, radicado en Santiago, deberá acumular y continuar la tramitación de las causas presentadas por HidroAysén (Endesa-Colbún) contra el Servicio de Evaluación Ambiental.
Esta situación se da luego de que el Tercer Tribunal de Ambiental (Valdivia), rechazara la decisión del Segundo Tribunal, que a finales de ocubre acogió la solicitud de acumular y revisar las causas interpuestas por los titulares del cuestionado proyecto hidroeléctrico.
El fallo sostiene que «Ante esta Corte no ha podido ser planteada tal contienda de competencia pues no existe la controversia sobre la que el Tercer Tribunal Ambiental requiere pronunciamiento. En efecto, existe una sentencia firme pronunciada por el Segundo Tribunal Ambiental de Santiago, que previa conformidad de ambas partes, accedió a la acumulación de autos solicitada al concluir que concurren los requisitos para ello. Encontrándose, por tanto, resuelto por una sentencia ejecutoriada la acumulación de ambos recursos de reclamación, no es posible promover a través de este incidente una nueva discusión sobre tal aspecto».
La firma interpuso dos reclamaciones; La primera contra la resolución de enero de 2014 que invalidó los acuerdos tomados por el Comité de Ministros y que permitió dejar posteriormente sin efecto la aprobación ambiental (junio de 2014); y la segunda contra la resolución que calificó negativamente el proyecto.
DGA denegó derechos de agua
Cabe recordar que el pasado mes de enero, luego del ultimatum dado por la Contraloría a la Dirección General de Aguas (DGA) para que concluyera el proceso de solicitud de derechos de agua de Hidroaysén correspondiente a la diligencia iniciada por la firma en 2007, que buscaba obtener derechos adicionales para su iniciativa hidroeléctrica ,el organismo, como era previsible, resolvió denegar la solicitud, sepultando así la última arista que quedaba para detener -al menos temporalmente- el cuestionado proyecto hidroeléctrico.