El Trafkintü hace referencia a una tradición propia de la cultura mapuche, que se realizaba entre diferentes comunidades con el fin de intercambiar especies y saberes. Esto permitía consolidar la economía comunitaria y complementarla con otras economías locales. Pues bien, el pasado 23 de mayo se realizó en el sector Pichi Curarrehue, Región de La Araucanía, un hermoso TRAFKINTU, organizado por la Red de ferias Walüng, en las inmediaciones de su Ruka, en el borde río del Trankura, en medio del bosque nativo y bajo portentosas montañas, donde nacen fuentes de agua.
Las actividades, que reunieron a una gran cantidad de delegaciones provenientes de diversos territorios, comenzaron desde muy temprano con un Llellipun, luego un desayuno, en seguida la presentación de las delegaciones y los tipos de semillas y productos a intercambiar. Asimismo, por la tarde se desarrolló un juego de palin y paralelamente una reunión de las integrantes de la Red junto a una ceremonia de cierre.
La amistad, la hermandad, el cariño y la reciprocidad, estuvieron siempre presentes en cada acto del Trafkintu, en efecto, desde el lugar se realizó un intercambio para enviar algunas plantas de árboles nativos para el LofMapu de Saltapura (Nueva Imperial) que fue devastado por un incendio en medio de plantaciones forestales de pinos y eucaliptus que consumió también el bosque nativo que mantenían como reserva en la comunidad.
Ana Epulef, una de las mujeres impulsoras de la revitalización ya tradicional del Trafkintu en el territorio, resaltó la importancia de estas prácticas para las economías locales, para la mantención de las semillas nativas y campesinas y para el intercambio de diversos productos y conocimientos.
Hacia una educación basada en el respeto, la biodiversidad y la soberanía alimentaria
En simples palabras: respeto, biodiversidad y soberanía alimentaria, podrían ser considerados como elementos que fueron parte del mensaje de conclusión que hubo en la reunión de socias/os de la Red de Ferias WaLúng que se reunió en el domo, estableciéndose que uno de los propósitos será el de fomentar una educación, en todos los ámbitos, en todas las escalas, que forje el respeto entre las personas, con la naturaleza y el desarrollo propio, exigiendo desde ya al sistema formal de educación, que incorpore en sus métodos enseñanzas sobre agro ecología, medio ambiente, soberanía alimentaria y asimismo, que la alimentación que se distribuye en los diversos establecimientos rurales y de localidades, no sea a base del estándar que se impone desde el centralismo, con parámetros que disienten con los tipos de alimentación local.
“No es posible que desde Santiago se defina qué tipo de alimentación van a tener, por ejemplo, los niños/as de Reigolil, cuando los tipos y formas de alimentación saludable están en los mismos territorios, con amplios conocimientos sobre ello desde las mismas familias locales. La educación tiene hasta la alimentación como un negocio y de esta forma, se desplaza también la soberanía alimentaria y los conocimientos locales. Si el sistema educacional no es capaz de transformar esto, entonces se continuará con tipos de enseñanzas que son transgresoras”, indicó Ana Epulef.
La Red y diversos participantes del Trafkintu, vienen desarrollando el levantamiento de sus economías, con distintos tipos de educación autogestionada, desde los huertos orgánicos, cultivos agro ecológicos, construcciones basadas en el respeto a la naturaleza, semillas ancestrales, gastronomía ancestral y amplias innovaciones para el buen vivir.
En diversos territorios, el Trafkintu continúa revitalizándose, en efecto, en Temuco, se realizará uno el 28 de mayo desde las 09:30 en Teodoro Wickel (Prat 321), organizado tradicionalmente por la organización “Hueichafe Domo”. Asimismo, en Panguipulli, se realizará otro el viernes 29 de mayo, en el lugar Trafkintuwe, desde las 10 de la mañana, bajo la denominación: “Fortaleciendo nuestra soberanía alimentaria y cultivando la biodiversidad.
Fuente: mapuche.info