Hoy a las 22:00 horas abrimos Adelantechile.cl Versión online de la revista estudiantil impresa de circulación nacional
Miles de jóvenes de distintos rincones del país somos lo que se conoce como movimiento estudiantil, movimiento que se caracterizó en el transcurso de la lucha del 2011 por romper la viejas estructuras que los partidos políticos de las élites le imponían, llevando la voz de la asamblea al debate Confech y sobrepasando las demandas mezquinas con reivindicaciones que hoy son la antesala de mayores movimientos que se desencadenan poco a poco. Ese es el camino que asumió el movimiento estudiantil chileno y ya no hay vuelta atrás.
En ese curso, una de nuestras mayores preocupaciones fue conquistar la opinión pública para nuestro favor, y así fue. La simpatía que ha generado nuestra demanda se ha multiplicado gracias a la fuerza del movimiento social, con más gente en las calles, con nuevas y mejores organizaciones políticas y sociales, con la irrupción sistemática de cada vez más líderes juveniles y sociales que no están dispuestos a dar su brazo a torcer, cuestión que se ha desarrollado en un clima de crisis y cambios a nivel mundial donde el relato triunfante del neoliberalismo se cae a pedazos.
Y es que el escenario no podría ser mejor, en Chile hoy todo está en cuestión. Después del 2011 comienzan a despertar ideas entre miles de chilenos que hasta hace poco era pecado tan solo imaginarlas. A gritos y en las calles exigimos renacionalización del cobre, educación gratuita, regionalización de la riqueza y la urgente necesidad de terminar con la constitución pinochetista de la República de Chile. Estamos viviendo un momento en el que la batalla por la conquista del sentido común cobra total relevancia.
En esa batalla, las demandas del 2011 -como todo discurso público- ha encontrado eco en los medios de comunicación, los cuales muchas veces han sido vitrina de los cambios que se producen en la sociedad chilena, sin embargo, hemos tenido que aprender a leer entre líneas de esta vitrina para intentar acceder a la veracidad de los hechos. De hecho, enormes son los obstáculos que las empresas de comunicación han arrojado a los movimientos sociales en coyunturas específicas y al pueblo chileno en una perspectiva de largo aliento. Ya sea criminalizando las demandas, desorientando a miles o nublando la conciencia de millones.
Sin embargo, pancartas levantadas por jóvenes, niños y adultos de todo el país denuncian permanentemente la complicidad de las grandes empresas de comunicación con los intereses de nuestros adversarios, cuestionamiento que debe pasar de la indignación para convertirse en exigencia, en demanda, en una reivindicación democrática.
La “democratización de los medios de comunicación chilena” es una demanda necesaria que los estudiantes movilizados debemos tomar para ampliar la simpatía de la opinión pública, conquistar el sentido común y seguir impulsando con más fuerza el despertar de los movimientos sociales, necesitamos contar con la aprobación, con la consecuencia y con la fuerza de la mayoría de la población chilena y para ello se torna urgente barrer con los obstáculos que nos impone el discurso oficial. Chile no puede continuar con un consejo Nacional de Televisión donde sus miembros son designados por el presidente de la república, consejo que entre cuatro paredes discrimina los contenidos y restricciones del medio de comunicación que tiene mayor impacto sobre nuestro pueblo y que genera grandes dividendos para el mercado nacional y mundial.
Junto con lo anterior, se vuelve impostergable la tarea de fortalecer el diálogo desde y entre los distintos sectores del pueblo chileno y aportar en el debate respecto a los caminos que deberemos enrumbar ahora que nos hemos puesto a caminar. Fortalecer el diálogo de los movimientos sociales no es otra cosa que oficializar nuestra verdad, la de los que queremos cambiar Chile y convertirlo en un país digno de su pueblo. Así nace Adelante, la primera revista hecha por un movimiento social.
Advertimos que Adelante no es una empresa privada periodística, cientos de estudiantes se han puesto manos a la obra para escribir, imprimir y distribuir esta revista que nace desde el seno del movimiento estudiantil, para todos los estudiantes de Chile y para el movimiento social en general. Adelante tampoco es un medio de contrainformación preocupado de responder a la agenda de los grandes medios.
Adelante se preocupa de nuestra propia agenda, de nuestros propios debates, de nuestros propios desafíos, de nuestras propias dudas y certezas que hemos adquirido en la movilización. Adelante, junto a una serie de nuevos medios alternativos de comunicación que han surgido hace poco tiempo, es la voz de los estudiantes chilenos que han decidido cambiar para siempre las desigualdades e injusticias de este país, voz que nace desde los pueblos más humildes de provincia hasta las ciudades más grandes del país. Una voz que ayer recorría las calles en forma de pancartas y consignas y que hoy circula en formato revista en liceos, universidades, quioscos y sindicatos, politizando el descontento, elevando los horizontes de lucha y fomentando la organización de cada vez más chilenos con voluntad de cambios verdaderos.
Cuesta trabajo imprimir Adelante, nadie nos ha regalado nada, pero aquí estamos, profundamente felices de ser parte de una generación que verá realizados en Chile todos los cambios necesarios para nuestros padres, nuestros hermanos y nuestros hijos.
Visita nuestro sitio web desde el jueves 21 de febrero a las 22 horas http://adelantechile.cl
Adelante, ¡Adelante Estudiantes de Chile!
No podemos dejar de agradecer a algunas personas que han hecho posible este proyecto:El hugo Solar, por desarrollar la web, don Dary Chaparro, por registrar los mejores momentos de la lucha estudiantil y los muchachos de Cerro Estudio, por orientarnos en la línea gráfica de la Revista y la página.
Roberto Sáez
Director