En la edición dominical de hoy de “el Decano” de la prensa en Chile, El Mercurio, hay un error garrafal. En el cuerpo de Reportajes (página 9), lugar de privilegio editorial, hay un artículo que hace referencia al Museo de Colchagua, que sustenta Carlos Cardoen, en la Región de O’Higgins. El error está en que el museo se ubica en la VI Región y no en la VII, como anuncia el periódico en la parte superior: “Tesoros en la Séptima Región”.
Para qué Edward$ tiene más de 200 periodistas de planta en El Mercurio, si se les pasan errores infantiles como estos. Colchagua nunca ha estado en la Región del Maule, es geografía básica de nuestro país.
Pero cuando usa sus datos geográficos en contra de los mapuche, son «eficientes». Sobre todo cuando da cuenta de los nexos internacionales con organizaciones terroristas. Separatistas vascos, gallegos, catalanes, la ETA y hace poco las FARC ocupan sendos espacios en sus páginas. Todo con el afán de proteger sus intereses económicos y discriminar a un pueblo a través de una campaña antimapuche que su único objetivo es estereotipar al mapuche como violento. Por su parte el Gobierno se lava las manos y toma palco para presenciar como El Mercurio dispara contra las comunidades que reclaman sus tierras.
Es necesario recordar que el énfasis de los medios de comunicación sobre el aparato público no tiene su raíz en la prensa televisiva, sino en la escrita, específicamente en El Mercurio, la institución secular más estable de Chile. El diario ha influido en elecciones, apoyó una dictadura y es el foco de los poderes fácticos, el apático grupo de presión que usa el poder económico, la Iglesia, los militares y los medios de prensa para imponer sus valores a todos los chilenos.
El Mercurio S.A.P (EMSAP) es propietario de: El Mercurio, La Segunda, Las Últimas Noticias, Radio Digital, y 17 periódicos distribuidos en todas las regiones de Chile y según las últimas informaciones, la cadena mercurial pretende fundar un diario en la ciudad de Chillán, en la Región del Bíobío, otro brazo que se suma a su poderoso monopolio mediático en Chile.