Si no lo fotografiaste, no lo viste. Si no lo viste, no existe. ¿Qué sucede entonces cuando este principio se aplica en la era de las redes sociales?
Citamos estas palabras del escritor Italo Calvino (1923-1985), ¿un adelantado a su tiempo?
La línea entre la realidad que es fotografiada porque nos parece bella y la realidad que nos parece bella porque ha sido fotografiada es muy estrecha. En el minuto en el que dices algo como «Ah, ¡qué hermoso! Debemos fotografiarlo!», ya estás muy cerca de la visión de la persona que cree que todo lo que no es fotografiado se pierde, como si nunca existiera, y que, para realmente vivir, debes fotografiar lo más que puedas, y para fotografiar lo más que puedas, entonces, debes vivir de la forma más fotografiable posible, o de alguna forma considerar fotografiable cada momento de tu vida. Lo primero lleva a la estupidez; lo segundo lleva a la locura.