Como mejor publicidad de radio de 2008, categoría Medios de Comunicación, fue premiada la frase “La misma wá” que hizo más conocido en el dial a este humilde medio de comunicación. El reconocimiento vino del Festival de Publicidad realizado en conjunto por la Asociación Chilena de Agencias de Publicidad (ACHAP) y la Asociación de Radiodifusores de Chile (ARCHI).
Pero la frase ahora se va a Cannes, Francia, al festival de publicidad más importante del mundo, a competir con creaciones hechas por agencias de publicidad para las grandes marcas del orbe. Samer Zeidan, uno de los creativos de “La misma Wá”, nunca se las dio de ganador, pero sí confiaba en que este trabajo, hecho con cariño y fruto de la mixtura entre reflexión y el productivo hueveo, tendría suerte.
Cómo se les ocurrió es una pregunta que muchos se han hecho. Partiendo por nosotros mismos en el diario. “Estábamos en la oficina cuando Hermes (Drago, director creativo de la Agencia Energía Young&Rubicam) me dice ‘cacha esto, ¿no cierto que suena como si dijera “la misma weá”?”. Samer asintió. La célebre melodía de El Rey León, erróneamente conocida como “The lion sleeps tonight”, en realidad decía en su estribillo, sin lugar a dudas, una y otra vez, de la boca de Timón y Pumba… la misma weá.
Ese mismo día Samer y Hermes se pusieron a trabajar y relacionaron su descubrimiento con las necesidades publicitarias de uno de sus clientes regalones, el que según ellos se arriesga más y les da mayor libertad creativa: El Ciudadano. “Al tiro supe que nos serviría para hacerle publicidad al diario, que tiene cojones y la iba a aceptar, porque la expresión está muy presente en la cotidianidad de los chilenos, que ya no se sorprenden con el hecho de que sus problemas sigan siendo los mismos”, cuenta Samer.
De inmediato fue consenso la idea de combinar la frase con lo que le está sucediendo al chileno común y corriente. “Sube la bencina, los aguinaldos son un chiste, tu jefe es un imbécil, tu mujer es más bien fea, y así”, cuenta Samer. Así nació la publicidad que hoy hace sus maletas para partir al viejo continente, a enfrentarse a los monstruos del consumo contribuyendo a hacer de este medio un esfuerzo con cada día mayor impacto.
El Ciudadano