En últimos años han surgido nuevos hechos delictivos relacionados con los fraudes electrónicos, los cuales han aumentado de manera significativa por el avance tecnológico y la emergencia sanitaria mundial.
Te puede interesar: Abordan ventajas y desafíos de la tecnología en Congreso Futuro Chile 2023
Con la llegada de la pandemia por covid-19, en el 2020, se registró un tráfico informático importante y fue cuando también aumentaron los fraudes electrónicos que han perjudicado desde adultos mayores hasta jóvenes y niños, refirió José Luis González Torreblanca, coordinador tecnológico del Sistema Universitario de Modalidades Alternativas (SUMA-UPAEP).
Señaló que a raíz del aumento en estos actos fraudulentos registrados a través de dispositivos móviles como teléfonos, tabletas y computadoras de escritorio, “la sociedad en general se ha visto quisquillosa a la hora de hacer movimientos digitales».
González Torreblanca manifestó que el mayor número de fraudes son los económicos, a través del robo de identidad.
Llamó a la sociedad a tomar precauciones al momento de intercambiar información, en especial cuando se realizan algunas compras por sitios de internet, porque en ocasiones los sitios no garantizan seguridad.
También a través de los correos electrónicos personales se presentan las operaciones fraudulentas, donde supuestas instituciones bancarias solicitan información para trámites, pero en realidad son acciones ilegales.
Sugerencias a la sociedad en general
José Luis González Torreblanca dijo que las personas deben tener cuidado con los «correos maliciosos» que llegan a las cuentas personales de correo electrónico y evitar compartir datos personales que propicien actos delictivos.
También recomendó precaución con los enlaces o links que se reciben a través de las redes sociales como Facebook, Instagram y WhatsApp y que “por curiosidad abrimos y descargamos; esta información podría ser un “gusano o algoritmo” que se encarga de sustraer la información personal, y es justo cuando se registra el llamado “phishing”, que los ciberdelincuentes utilizan para robar información confidencial de las personas, como cuentas bancarias, contraseñas e incluso los historiales que tengan las personas de sus compras por internet, entre otros datos».
Otra forma de operar de los delincuentes es la extorsión por medio de engaños; la gente realiza depósitos bancarios a estafadores que se hacen pasar por familiares o amigos.
Por último, González Torreblanca recomendó verificar «las veces que sea necesario» la información que se recibe a través del correo electrónico, redes sociales o llamadas telefónicas; además de mantener informados a los miembros de la familia sobre cualquier acción o movimiento inusual que pueda terminar en un fraude.
Foto: Agencia Enfoque
Recuerda suscribirte a nuestro boletín