El candidato a la gubernatura de Puebla, Eduardo Rivera Pérez, reconoció que no hay una razón jurídica para retirar el contrato que él entregó durante su primer periodo como presidente municipal a la empresa Concesiones Integrales para hacerse cargo del servicio de agua, por lo que sólo queda exigirle a la empresa que mejorer su trabajo.
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El abanderado de la coalición Mejor Rumbo para Puebla declaró en entrevista que la privatización del agua en Puebla ha sido usada por Morena en las últimas elecciones como bandera política, pero dijo que ni el gobernador, ni el Congreso del Estado, con mayoría de representación del partido guinda, han hecho algo para tumbar la concesión.
De igual forma, Rivera Pérez mencionó que desde el mismo Poder Legislativo con mayoría de morenistas fue que se avaló el incremento a las tarifas del servicio de agua en la entidad. Mencionó que en su momento, el estatus jurídico de la concesión fue avalado por «todos los partidos políticos» en el Congreso.
«Si tanto la usan de bandera en elecciones, ¿Por qué no la quitan? ¿Por qué el gobierno actual no la quita? ¿Por qué el Congreso actual no la echa para atrás?, me parece que se ha desvirtuado el debate»
Eduardo Rivera Pérez
Candidato a la gubernatura por Mejor Rumbo para Puebla
No obstante, puntualizó que el estatus jurídico de la actual concesión es claro, por ello, únicamente se puede hacer una revisión al contrato para mejorar el servicio y exigirle a Agua de Puebla buenos resultados.
Dijo que se debe atraer mayor inversión para la reconducción de agua y así combatir su carencia en determinadas zonas de la entidad.
Además de lo anterior, opinó que hacen falta acciones para mejorar la administración de pozos en juntas auxiliares, ya que mientras hay casos en los que su operación es óptima, en otros sólo se trata de negocios familiares.
«Hay que mejorar la decisión que se tomó. Mi postura ha sido puntual, tiene que mejorarse y exigirle a la empresa buenos resultados. Hay que buscar inversiones para que la cantidad de agua que llega a Puebla y su zona metropolitana sea suficiente»
Cabe recordar que en 2013, durante su primer periodo como presidente municipal de Puebla, Eduardo Rivera Pérez avaló la privatización del Soapap bajo el argumento de que necesitaba recibir inversiones para mantener su red de distribución de agua y la calidad de su servicio, ya que el gobierno municipal no era capaz de ello.
A más de 10 años de esto, la actual concesionaria, Agua de Puebla, ha sido señalada en diversas ocasiones por su pésimo servicio y el recorte a la distribución de miles de usuarios, quienes han llegado a promover denuncias y ganar amparos porque las normas locales y federales lo prohíben.
Como presidente municipal, Eduardo Rivera llegó a argumentar que desprivatizar el agua en Puebla podría representar un gasto de 7 mil millones de pesos, debido a costos de inversión y contraprestación establecidos en el contrato con Agua de Puebla, además de mil 700 millones por un adeudo con Banobras.
Ilustración: Iván Rojas
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