La policía peruana desplegó al menos 24 mil agentes en todo el país para controlar el orden público ante la llamada «tercera toma de Lima».
Te puede interesar: Gestión de Dina Boluarte devaluada: menos del 15% de peruanos la aprueba
En una veintena ciudades realizaron protestas, exigen la destitución de la presidenta Dina Boluarte y de los miembros del Congreso.
- Hace cuatro meses, entre diciembre y febrero, las manifestaciones por la destitución del presidente Pedro Castillo dejaron 67 muertos
En la capital Lima, la principal movilización añadió a sus demandas que los responsables de los fallecidos en las anteriores protestas sean castigados.
Uso de la fuerza
Días atrás, el gobierno anunció que haría uso de la fuerza, incluso con armas de fuego, en caso de que haya peligro para la vida de la policía.
En la plaza mayor de Huancavelica, en los Andes, la policía usó gases lacrimógenos para dispersar a 3 mil manifestantes.
Lo anterior, porque la puerta de la oficina local del Ministerio del Interior fue consumida por el fuego que prendieron los inconformes.
Los manifestantes, entre ellos, albañiles, universitarios y vecinos, coreaban:
“Esta democracia ya no es democracia; Dina, asesina, el pueblo te repudia”
También puedes leer: Gobierno de Perú se niega a pedir disculpas por las muertes en protestas
El gobierno de Dina Boluarte afirmó que la minería informal, el narcotráfico y el contrabando financiaban las marchas.
Además, extendió el estado de emergencia en zonas claves, medida que permite a policía y ejército vigilar las regiones en conflicto.
Foto: Twitter
Recuerda suscribirte a nuestro boletín