Los delitos en Puebla continúan incrementándose y durante julio tuvieron un ligero repunte en comparación con junio, de acuerdo con el Observatorio Nacional Ciudadano de Seguridad, Justicia y Legalidad.
Según los datos actualizados el 20 de agosto y que se alimenta con información del Sistema Nacional de Seguridad Pública, el municipio de Puebla y su zona conurbada es un foco de delitos.
Además, otras demarcaciones como Oriental, San Martín Texmelucan, el Triángulo Rojo y la región de Izúcar de Matamoros destacan como zonas de alta incidencia delictiva.
En toda la entidad se registró una incidencia delictiva de alrededor de 200 delitos por cada cien mil habitantes; entre las agresiones destacan los robos de todo tipo: a transeúnte, en transporte público y a negocio; así como los ataques sexuales, la violencia familiar y contra las mujeres.
Robos con violencia
En Puebla capital los delitos con mayor incidencia son los robos con violencia, 26.61 casos por cada cien mil habitantes; robo a negocio, 12.11; a transeúnte, 17.08; y a transporte público, 1.93.
En comparación con el mes de junio, según los datos del observatorio, sólo el robo a negocio se incrementó durante julio.
Además de los robos, destacan los ataques sexuales y contra las mujeres. Los feminicidios se incrementaron al pasar de 0.11 a 0.22 por cada cien mil habitantes de junio a julio.
La violencia familiar pasó de 11.35 a 14.68 casos por cada cien mil habitantes; mientras que el delito de violación fue de 1.70 a 1.64 por cada cien mil habitantes, de junio a julio.
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Robo a transeúnte
En San Andrés Cholula destacó el aumento del robo a transeúnte al pasar de 15.15 a 18.33 delitos por cada cien mil habitantes de junio a julio; en San Pedro Cholula aumentó el robo a transeúnte de 12.53 a 19.90; y el robo a transporte público de 3.69 a 5.90.
En Cuautlancingo también los robos a transeúnte y a transporte público aumentaron al pasar de 15.12 a 17.02 y de 3.78 a 7.56 por cada cien mil habitantes de junio a julio, respectivamente.
Mientras que en Coronango se disparó el robo a negocio al pasar de 0 a 12.20 delitos por cada cien mil habitantes.
Oriental y San Martín, los más peligrosos
En el caso de Oriental, el robo con violencia es el principal delito, al pasar de 30.75 a 71.75 casos por cada cien mil habitantes; el robo de vehículo fue de 5.13 a 15.38; y el robo a transeúnte de 5.13 a 20.50.
En este municipio destaca la violencia familiar con una tendencia estable de casos, aunque de junio a julio de este año fue de 10.25 a 20.50 casos por cada cien mil habitantes.
Mientras que en San Martín Texmelucan el principal delito es el robo con violencia que pasó de 64.61 a 75.17 casos por cada cien mil habitantes; y el robo a transeúnte que fue de 8.70 a 13.05 delitos.
Además, el delito de violación es frecuente en este municipio y de junio a julio de este año fue de 1.24 a 2.48 casos por cada cien mil habitantes.
Triángulo Rojo e Izúcar, focos de delitos
En el famoso Triángulo Rojo destacan los municipios de Tecamachalco y Palmar de Bravo como las demarcaciones con mayor incidencia delictiva.
En Tecamachalco el principal delito es el homicidio y de junio a julio se incrementó de 3.59 a 9.57 casos por cada cien mil habitantes.
Otros delitos que crecieron fueron los robos a negocio y a transeúnte al pasar de 1.20 a 2.39 por cada cien mil habitantes y 3.59 a 9.57, respectivamente.
Mientras que en Palmar de Bravo los robos con violencia y a vehículo son los principales delitos: el primero disminuyó de 20.38 a 18.34 y el segundo creció de 6.11 a 14.27.
Esta es otra demarcación en la que también existe el delito de la violencia familiar y de junio a julio aumentó de 14.27 a 16.31 casos por cada cien mil habitantes.
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La zona de Izúcar de Matamoros cuenta con dos municipios que también destacan por su alto índice delictivo.
El primero es Izúcar donde destaca el robo con violencia y el robo a transeúnte; el primero creció de 9.93 a 17.38 y el segundo de 3.72 a 7.45 por cada cien mil habitantes.
El caso de Tepeojuma es de llamar la atención, pues su delito más frecuente es la violencia familiar al pasar de 0 casos a 44 por cada cien mil habitantes.