El canciller alemán, Olaf Scholz, aseguró ayer que su gobierno y la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) no desempeñarán un papel activo en el conflicto de Ucrania.
“Está absolutamente claro para nosotros que no habrá participación militar de la OTAN en este conflicto”, aseguró Scholz en conferencia de prensa después de visitar el comando de operaciones de la Bundeswehr. “Lo descartaremos con todo lo que hagamos”.
Comentó que el gobierno alemán utilizará todos los medios diplomáticos “para asegurar que se intente la posibilidad de una salida conjunta de esta crisis, aunque ya haya llegado a este punto”.
Destacó que será necesario garantizar que no se produzcan ataques en el territorio de la Alianza del Atlántico, por lo que se han intensificado los esfuerzos para asegurar las fronteras de los aliados que limitan con Rusia y Ucrania. “Pero son puramente defensivos y se mantienen en el territorio de la OTAN”, agregó.
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Scholz dijo a la cadena televisión alemana ZDF que la intervención de la OTAN “traería una escalada dramática de esta difícil situación en Ucrania, traería grandes peligros”. Remarcó la necesidad de evitar una confrontación directa, por lo que considera que la participación de la alianza en el conflicto “no sería una política responsable”.
En este contexto, el presidente ucraniano, Volodymir Zelensky, lamentó la decisión “deliberada” de la alianza de no establecer una zona de exclusión aérea en Ucrania con el fin de proteger a la población de los ataques de cazas rusos.
“Hoy ha tenido lugar una cumbre de la OTAN, una cumbre débil y confusa, en la que se ha visto que no todos consideran la lucha por la libertad en Europa como el objetivo número uno”, dijo en un video. “A pesar de saber que nuevos bombardeos y nuevas bajas resultan inevitables, la OTAN decidió de manera deliberada no cerrar el espacio aéreo de Ucrania”, criticó.
En Bruselas, el secretario general de la alianza, Jens Stoltenberg, sostuvo que la medida podría generar una escalada del conflicto y provocar una «guerra total» en Europa, envolviendo a muchos otros países y causando mucho más sufrimiento.
“No debemos tener aviones sobre el espacio aéreo de Ucrania, ni tropas de la OTAN en su territorio”, comentó al término de una reunión de urgencia de cancilleres de la organización. “No formamos parte de este conflicto, y tenemos la responsabilidad de garantizar que no se agrave y se extienda más allá de Ucrania”, agregó.
En la visión de Stoltenberg, “la única forma de implementar una zona de exclusión aérea en Ucrania” es mediante el envío de aviones de combate de la OTAN que tendrían que derribar aviones rusos que operan sobre territorio ucraniano. “Entendemos la desesperación, pero también creemos que, si hiciéramos eso, terminaríamos con algo que podría acabar por volverse una guerra en toda regla en Europa”.
Por esa razón, indicó que sus aliados tomaron la “decisión dolorosa” de reforzar sanciones y el apoyo a Ucrania, pero “sin involucrar fuerzas de la OTAN directamente en el conflicto en Ucrania, ni en su territorio ni en su espacio” aéreo.
Stoltenberg recibió durante la jornada al secretario de Estado estadunidense, Antony Blinken, antes de una reunión de emergencia de la que participaron también el jefe de la diplomacia de la Unión Europea, Josep Borrell, y cancilleres de Finlandia y Suecia, dos países asociados.
La titular de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, dijo en una declaración junto a Blinken que la UE está “lista” para aplicar más sanciones a Rusia en el caso de que el presidente Vladimir Putin no detenga la guerra en Ucrania.
En tanto, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos exigió a Moscú tomar medidas para proteger a la población civil ucrania y permitir su evacuación.
Con información de La Jornada
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