Por Gerardo Sifuentes
Los supermercados son fuente de abasto de alimentos para miles de familias en zonas urbanizadas. Se asume que gracias a técnicas de marketing aplicadas en estas tiendas; como la colocación estratégica de productos alimenticios destacados por su precio o disponibilidad en temporada, se puede influir en la decisión de compra.
Una investigación reciente de la Universidad de Southampton, Inglaterra, evaluó si cambiar el diseño de exhibición de productos saludables puede mejorar la elección en la calidad de los alimentos comprados por los clientes.
Al entrar en supermercados o hacer fila en sus cajas podemos ver una amplia oferta de alimentos procesados, como dulces o botanas para consumo individual; mismos que tienen un efecto perjudicial en la salud. Aunque hay estudios que buscan comprobar la eficacia de las estrategias de ubicación, colocando productos saludables junto con los no saludables, estos han tenido un alcance limitado y los hallazgos inconsistentes.
Evalúan a compradores a través de un diseño saludable
En esta ocasión, un equipo de investigadores encabezado por la doctora Christina Vogel, de la Unidad de Epidemiología de la universidad inglesa, publican en PLOS Medicine la evaluación de una propuesta de diseño “saludable” de oferta de productos en piso de ventas, esto con el objetivo de observar el comportamiento del consumidor.
La investigación se llevó a cabo en asociación con una cadena de supermercados a nivel nacional en Inglaterra, donde también se observaron las ventas en los locales intervenidos, así como los patrones de compra y dietéticos de una muestra de clientes habituales.
Entre los hallazgos, se encontró que eliminar los dulces y otros productos no saludables de las cajas y al final de los pasillos cercanos, mientras se colocan frutas y verduras cerca de la entrada de las tiendas, impulsa a los clientes a realizar compras de alimentos más saludables. Se descubrió además que con este diseño:
- Las ventas de dulces y botanas disminuyeron
- Mientras las ventas de frutas y verduras aumentaron cuando en las cajas se colocaron artículos no alimenticios y agua
- También el colocar una sección ampliada de frutas y verduras, cerca de la entrada de la tienda incide directamente en la decisión de opciones de alimentación sana.
Una política pública respecto a los alimentos no saludables
Aunque los autores del estudio advierten que estos resultados deben tomarse con cautela, argumentan que una política pública que prohíba la exhibición destacada de alimentos no saludables en los supermercados podrían ser beneficiosa para la dieta de la población general, y los efectos podrían ser incluso mejores si los supermercados fuesen obligados a colocar productos saludables cerca de sus entradas.
Sobre los resultados, la doctora Vogel opinó en un comunicado:
«Modificar la distribución de los supermercados podría ayudar a las personas a elegir alimentos más saludables; y cambiar la dieta de la población hacia las recomendaciones dietéticas del gobierno»
«Los hallazgos de nuestro estudio sugieren que una distribución más saludable de las tiendas podría generar casi 10,000 porciones adicionales de frutas y verduras; y aproximadamente 1,500 porciones menos de productos de confitería que se venden semanalmente en cada tienda «
Doctora Christina Vogel
Unidad de Epidemiología de la universidad inglesa
En este sentido resulta inevitable preguntarse si este tipo de acciones sería aceptado por la alta dirección de los supermercados, y por supuesto si las grandes empresas de alimentos procesados estarían dispuestas a disminuir sus ganancias en favor de la salud de la sociedad.