A comienzos del año 2023, con la firma de más de 50 congresistas, solicité una Sesión Especial de la Cámara de Diputadas y Diputados con el objetivo de analizar y discutir el funcionamiento y administración de CODELCO en la última década, alertado por la significativa baja en su producción, fallas en sus proyectos estructurales y pérdida de capacidad de FURE (fundición y refinación), entre otras materias. Se celebró el pasado martes 14 de marzo. A la Sala asistieron el ministro Mario Marcel, la Ministra Marcela Hernando, Máximo Pacheco, Presidente del Directorio y un representante de COCHILCO.
A mediados del 2022 Máximo Pacheco, informó a nuestro país que la principal empresa del Estado tendría una ostensible e impensada nueva caída en la producción de cobre fino de 170 mil toneladas en 2023, cifra que equivale a cerca de un 12%, quedando con una producción anual inferior a 1,5 millones de toneladas (cifra que no se observaba desde la crisis del año 2008), situación que se mantendría hasta el año 2027. Dijo que la baja en la producción se debe por los atrasos en los proyectos estructurales y problemas operacionales.
Ahora bien, ¿por qué debería importarnos ello? ¿Cómo nos afecta a los chilenos y chilenas una caída en la producción de CODELCO? Pues toda baja en la producción de la empresa estatal, impacta directamente en las arcas fiscales. Tal como señalé en la sesión y como se indica en el cuadro adjunto el plan con que se aprobaron los proyectos estructurales señalaban que se alcanzaba una producción de 2 millones de toneladas a partir del año 2023, y en el escenario actual solo llega a poco más de 1,4 millones de toneladas. Los errores de cálculo en la producción de casi de un tercio y de costos, en algunos superior al 50%, son impresionantes, pérdida de producción de 0,6 millones de toneladas al año, equivale a un menor ingreso para los próximos 5 años de US$ 24.471.- millones y una pérdida de utilidades de US$ 9.257.– millones, considerando un costo neto de cátodos de 2,3 US$/libra y un precio de cobre de 3,7 US$/libra. El mayor costo de los proyectos son otros varios miles de millones de dólares.
Se indica que problemas de continuidad operacional, tales como el colapso del domo y correa transportadora en la División de Chuquicamata y la falla en mina Ministro Hales, serían causas de la disminución en producción actual. Sin embargo, resulta curioso que, en su momento, se indicó que estos problemas no impactaban en la producción de acuerdo a los comunicados oficiales de CODELCO, lo que significa por lo menos inexactitud y ocultamiento en la información que nos entrega la estatal.
Por otro lado, efectivamente, ha habido un enorme retraso en los principales proyectos estructurales de CODELCO, a saber: Chuquicamata Subterránea, Cartera de Desarrollo en la División Teniente, Traspaso Andina y Rajo Inca de la División El Salvador, tal como es posible advertir en los siguientes cuadros, elaborados por COCHILCO sobre la base de antecedentes entregados por CODELCO en su Plan de Negocios y Desarrollo de 2014.
En dicho instrumento de planificación se proyectaba para los 10 años siguientes, con los proyectos estructurales en funcionamiento, una producción de casi 2 millones de toneladas de cobre fino para el año 2023, sin embargo los resultados del ejercicio 2022 como se dijo y las proyecciones dadas a conocer, nos dejan con una estimación de solo 1,4 millones de toneladas.
Esta situación es escandalosa, pero no es el único aspecto de la gestión de CODELCO que cuestiono. CODELCO hace más de 40 años que no invierte en nuevas fundiciones y refinerías, y las inversiones destinadas a restaurarlas no han dado la producción esperada (a modo de ejemplo, se han invertido US$2 mil millones en la Fundición de Chuquicamata, no obstante actualmente está produciendo solo algo más de 50% para lo que fue diseñada). Chile, era líder global en 1990 en capacidad de fundición, con un 14,6%, sobre Japón y China. El 2018 (no tengo datos posteriores) Chile fundía solo 7,9% y China sobre el 30%. Ver cuadro. Y sin mencionar el anunciado cierre de Ventanas.
Por otro lado, resulta desconcertante que a pesar de los malos resultados que ha tenido la administración, se mantengan, e incluso aumenten, los sueldos de un desmedido número de ejecutivos responsables de la dirección y administración de la empresa, los cuales superan los 500 millones de pesos brutos anuales. Incluso se ha denunciado que los exvicepresidentes de recursos humanos y de asuntos corporativos y sustentabilidad, por haber estado 5 meses con permiso con goce de sueldo, o sea, sin trabajar recibiendo esos millonarios sueldos, hasta el término de su contrato y otros que se han subido el sueldo para mejorar las indemnizaciones.
Los y las dirigentes sindicales de la cuprífera, están preocupados por lo qué pasa en la compañía y denuncian con fuerza y con antecedentes que la vasta externalización de áreas de mantenimiento y operaciones en empresas de terceros, han dañado la productividad y los equipos han sido mal mantenidos. Son trabajos que requieren alta especialización y los terceros tienen poco conocimiento, carecen de experiencia y/o no tienen los recursos necesarios. Al respecto, se han producido una serie de accidentes fatales en CODELCO que tienen en común que las víctimas (QEPD) han sido trabajadores de empresas de terceros, por lo que cabe hacerse la pregunta de si estas empresas cumplen con los mismos criterios de seguridad de CODELCO. Además, denuncian que se repiten las mismas empresas de terceros en licitaciones o asignaciones directas para nuevos trabajos, a pesar de que en ciertos casos se han incumplido los contratos. Por ejemplo, señalan que el Horno Flash de la Fundición de Chuquicamata fue mal reparado el año 2017 por la empresa AUTOTEC, sin embargo, actualmente se contrató a la misma empresa para su nueva reparación.
Evidentemente, la responsabilidad del estado actual de CODELCO es compartida en muchos gobiernos y claramente de los directorios, (muchos han llegado sin tener idea de minería), también de las últimas administraciones y de un inadecuado sistema de fiscalización que deja de manifiesto lo aversa que es la Compañía para dejarse fiscalizar, como se ha demostrado en investigaciones de la propia Cámara, de la Contraloría General de la República y de COCHILCO que han dejado al descubierto fraudes, malas prácticas, opacidad, contratos con personas relacionadas, etc. Sin embargo, si bien es fundamental que se asuma responsabilidad por todos los actores, no basta apuntar a los y las culpables con el dedo. Necesitamos pensar en cuál es el plan para volver a los 2 millones de toneladas de cobre fino, al año, o más como en algún momento se dijo y pensar en el CODELCO de los próximos 50 años, recuperar margen en el mercado del FURE y entrar sin temor al litio.
A pesar de la situación actual en que se encuentra, no podemos obviar que CODELCO es la empresa más importante de Chile y ha tenido, tiene y debe tener en el futuro inmediato un rol económico y estratégico fundamental para el país. Estamos viviendo una gran transformación energética y es nuestra oportunidad para que Chile, mediante una nueva CODELCO, se convierta en un agente global que lidere la lucha contra el cambio climático, al prevalerse de sus reservas y producción de cobre y litio chileno, entre otros minerales.
Incluso de lo que dicen desde CODELCO hoy no nos podemos confiar, hay quienes tiene unas mirada más negativa y creen que la crisis es más profunda y más riesgosa. Es por ello que en la Sesión Especial, además de hacer presente mi preocupación y diagnóstico al Ministro de Hacienda, a la Ministra de Minería al Presidente del Directorio y a todos los y las parlamentarias presentes, propuse, mediante un Proyecto de Resolución que fue aprobado por 97 votos, auditar integralmente a la empresa por una Comisión de Expertos(as) nacionales e internacionales, para objetivar su situación y sus causas; reforzar el Gobierno Corporativo; modernizar el sistema de fiscalización externa; activar una División de Prospectiva en La Moneda (hace falta la mirada de largo plazo desde el estado) y fomentar la participación de CODELCO en la industria del litio, no solo en Maricunga, sino que también en el Salar de Atacama, entre otras sugerencias.
Confiamos que el Gobierno del Presidente Gabriel Boric cumplirá con los compromisos de su programa, para así potenciar la industria nacional del cobre y del litio con un rol preponderante del Estado. Gabriel Boric, ya tuvo un importante gesto, comprometió que en su cuatrienio CODELCO capitalizará un 30% de sus utilidades, en contraste con la administración anterior que no solo la endeudó de manera importante sino que la hizo adelantar pago de utilidades al fisco, estresándola más, como lo recordó el ministro Mario Marcel en la sesión.
Para profundizar puede ver íntegramente la sesión 3 del 14 de marzo en www.camara.cl
Jaime Mulet Martínez
Abogado UC. MBA UAH. Diputado de la Comisión de Minería y Energía.
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