Este jueves se llevará a cabo una sesión especial para que la Cámara de Diputadas y Diputados vote para su despacho el proyecto que busca un royalty minero al cobre y litio, una iniciativa que apunta recaudar un mayor fondo fiscal para brindar ayuda económica a las familias en medio de la pandemia de Covid-19.
El proyecto ha tenido una larga discusión, luego de que el pasado 24 de marzo fuera aprobada en general en la Cámara, y posteriormente debatida en particular en las comisiones de Minería y Energía y de Hacienda, desde donde fue visada con algunos cambios, por lo que hoy debería ser nuevamente votada.
La norma tiene como fin es establecer una compensación a favor del Estado por la explotación de la minería del cobre y del litio, equivalente al 3% del valor ad valorem de los minerales extraídos.
El texto señala que la compensación del 3% se invertirá en la región minera respectiva, y si se supera ese umbral, la recaudación irá al Estado para enfocarlo en gasto social, explicó. Asimismo, se destinarán recursos para investigación y desarrollo, fijando la entrega de hasta un 3% del monto total recaudado para el Ministerio de Ciencias y Tecnología, para investigaciones relacionadas con el Covid-19 y para investigación regional.
Sigue leyendo: Comisión de Hacienda aprobó y despachó proyecto de royalty minero
Desde la oposición anticipan un resultado positivo en la discusión y votación para que la moción por fin pueda avanzar a su siguiente trámite legislativo en el Senado, donde volverá a ser evaluado. Sin embargo, el Gobierno insiste en calificar la norma como inconstitucional, alegando que la creación de un tributo esta materia es de atribución exclusiva del Presidente de la República.
El proyecto también es resistido por las mineras. Según la Sociedad Nacional de Minería (Sonami), sostuvo que este tributo “va a tener consecuencias muy graves”, y el presidente del Consejo Minero, Joaquín Villarino, advirtió que “la minería está dispuesta a discutir sobre su carga tributaria para que haya una mayor recaudación, pero que al mismo tiempo ello permita un desarrollo del sector”.
Esta semana, el ministro de Minería, Juan Carlos Jobet, también se sumó a los cuestionamientos y ratificó que el Gobierno no está de acuerdo con el proyecto.
El biministro aseguró estar preocupado por el despacho del proyecto ya que podría “alejar a los inversionistas de Chile”, porque “lamentablemente pone a Chile como un país con una tasa de impuesto a la minería completamente fuera de rango«, dijo en declaraciones a a T13.cl.
Falsos argumentos de Jobet
El economista de la Universidad de Chile, Nicolás Bohme, indicó que los argumentos que emplea el ministro de Minería para alertar sobre el supuesto retiro de las inversiones de aprobarse el royalty son falsos.
Recordó que Jobet presentó un ejercicio afirmando que, con el precio a US$4,50 la libra, la carga tributaria de las mineras llegaría a un 82% de las utilidades antes de impuestos. Al ser mayor a otros países productores de cobre, la minería en Chile se volvería inviable.
Al respecto, el investigador del Observatorio de Políticas Económicas (OPES), explicó que dicho ejercicio «posee debilidades conceptuales, supuestos muy cuestionables y errores de cálculo, por lo que carece totalmente de validez«.
Entre los errores conceptuales plantea que el ejercicio es irrelevante y recuerda que «las decisiones de inversión se toman mirando la rentabilidad el capital, no carga tributaria. Para los precios esperados (que superan incluso los US$ 5 la libra), la rentabilidad será alta con o sin Royalty».
«Lo racional es seguir invirtiendo«, subrayaó en un hilo de mensajes publicados en Twitter.
Indicó que los supuestos de Jobet son irreales, ya que insiste en una metodología que ya causó polémica a partir de un estudio de EY encargado por el Consejo Minero y señaló que «la propia consultora EY reconoció que sus supuestos no responden a la situación de la minería en Chile».
Bohme aclaró que parte de las utilidades se remesan al exterior en forma de pago de intereses de deudas contraídas con empresas relacionadas, «pagando una tasa adicional de 4%, y no la tasa de 35%» que asume el titular de Minería.
«Además, inversionistas nunca retiran la totalidad de las utilidades, por lo que pagan una tasa de 35% solamente por una fracción de las ganancias. En parte reinvierten en la empresa, en parte buscan subterfugios para retirar utilidades sin mostrarlo en su contabilidad», planteó.
A juicio del economista, Jobet comete errores de cálculo (deliberadamente o no), y el más evidente es «que lo que las empresas paguen de Royalty será descontado de sus utilidades». Al respecto, precisó que el ejercicio propuesto por el ministro «asume que el impuesto corporativo se mantendrá igual con o sin Royalty».
Señaló que una vez aprobado el Royalty, el Impuesto Específico a la Minería debe derogarse, tal y como lo proponen impulsores del proyecto. Sin embargo, el Ministerio de Minería asume que ambos mecanismos operarían conjuntamente.
El investigador e integrante del directorio del OPE destacó que afortunadamente, este tipo campañas del terror que fueron tan efectivas en el pasado ya no surten el mismo efecto y manifestó que espera que los «parlamentarios/as no sucumben al poderoso lobby de las mineras».
«Es momento de recuperar el cobre para Chile«,puntualizó.