Donald Trump ha anunciado como pilar de su política exterior la intención de someter, de llegar a la Casa Blanca, a un “escrutinio extremo” a todo aquel que quiera entrar en Estados Unidos. La idea es obligar a inmigrantes y/o visitantes —ni siquiera lo dejó demasiado claro— a realizar un “test ideológico” para comprobar que comparten los valores norteamericanos, o lo que el candidato republicano entiende por ese concepto.
“Aquellos que no crean en nuestra Constitución, o quien apoye la intolerancia y el odio, no serán admitidos para inmigrar a este país”, adelantó Trump el lunes en un discurso en Ohio.
La propuesta ha sido rápidamente descalificada por quienes consideran que se trata de un paso más en su estrategia antimusulmana, después de insistir durante su campaña en la necesidad de impedir la entrada a EE UU de musulmanes como fórmula para combatir al Estado Islámico (ISIS).
«Es un test que él no superaría», afirmó este martes la candidata demócrata, Hillary Clinton.El líder demócrata del Senado, Harry Reid, fue más allá aún y retó a Trump a someterse a una prueba similar. Concretamente, le instó a pasar el test al que las autoridades migratorias someten a toda persona durante el proceso de naturalización para obtener la ciudadanía estadounidense.
“Ya que Donald Trump quiere requerir nuevos exámenes para inmigrantes, él debería tomar el examen que los inmigrantes deben pasar para poder convertirse en ciudadanos estadounidenses”, dijo el influyente senador por Nevada.
Khizr Khan, el padre de un soldado musulmán muerto en la guerra de Irak que se ha convertido en una de las bestias negras de Trump, se declaró incluso dispuesto a hacer el test junto al candidato republicano.
“Desafío a Trump a someterse conmigo al test de naturalización cuando quiera”, afirmó en un correo electrónico a The Huffington Post. Khan y su mujer, Ghazala, se convirtieron en inesperadas estrellas de la convención demócrata a finales de julio cuando subieron al escenario para hablar de su hijo muerto, el capitán Humayun Khan, y de los muchos musulmanes dispuestos a perder la vida por su país, EE UU.
El padre del soldado Khan cuestionó al rival republicano de Hillary Clinton, al que acusó de no haber sacrificado nada por el país que aspira a presidir y, sacándose una Constitución del bolsillo, cuestionó incluso que Trump se haya leído el texto base de la democracia estadounidense. Los ataques del candidato republicano a la familia Khan provocaron una dura respuesta de buena parte de la comunidad militar —para la que los soldados caídos y sus familias son sagradas— y una caída en las encuestas de la que aún no se ha recuperado. Los Khan, de origen pakistaní, se convirtieron en ciudadanos estadounidenses en 1980, después de superar el test de ciudadanía.
Este consiste en 100 preguntas de “educación cívica” sobre historia y gobierno en Estados Unidos, salpicadas con algunas de geografía. Durante el proceso de naturalización, el postulante debe responder a diez de esas preguntas, de las que debe contestar correctamente seis.
Estas son algunas de las preguntas que podrían caerle a Trump si acepta el desafío de Reid y Khan:
– ¿Cuál es un derecho o libertad que la Primera Enmienda garantiza? (respuesta: expresión, religión, reunión, prensa o peticionar al gobierno)
– ¿En qué consiste la libertad de religión? (Se puede practicar cualquier religión o no tener ninguna)
– ¿De cuántos años es el término de elección de un senador de los Estados Unidos? (seis)
– Si tanto el Presidente como el Vicepresidente ya no pueden cumplir sus funciones, ¿quién se vuelve Presidente? (el Presidente de la Cámara de Representantes)
– ¿Quién escribió la Declaración de Independencia? (Thomas Jefferson)
– ¿Qué territorio compró los Estados Unidos de Francia en 1803? (Louisiana)
– ¿Qué hizo Susan B. Anthony? (luchó por los derechos de la mujer y por los derechos civiles)
– Antes de ser presidente, Eisenhower era general. ¿En qué guerra participó? (en la II Guerra Mundial)
– ¿Por qué hay 13 franjas en la bandera? (porque representan las 13 colonias originales)
El senador Reid, mano derecha del presidente Barack Obama en el Congreso, se declaró convencido de que Trump “de seguro reprobaría esa prueba, dada su ignorancia y entendimiento de la historia básica de Estados Unidos, sus principios y funcionamiento de nuestro gobierno”.
También la rival demócrata de Trump, Hillary Clinton,
Por ahora, el candidato republicano no ha respondido al desafío.