Aplican inyección letal a «vampiro» que le cortó la garganta a niño de 12 y le chupó la sangre

Un hombre que mató, mutiló y bebió la sangre de un niño de 12 años de edad, recibió hace dos días la pena de muerte en Texas

Aplican inyección letal a «vampiro» que le cortó la garganta a niño de 12 y le chupó la sangre

Autor: Leo Robles
La camilla donde se recostó el asesino para recibir su muerte.

La camilla donde se recostó el asesino para recibir su muerte.

Un hombre que mató, mutiló y bebió la sangre de un niño de 12 años de edad, recibió hace dos días la pena de muerte en Texas. El psicópata se llamaba Pablo Vásquez (38) y mató al niño David Cárdenas hace 18 años atrás golpeándolo con un tubo en la cabeza, para luego cortarle la garganta y chuparle la sangre, después de haber consumido un cóctel de marihuana, cocaína y alcohol en una fiesta.

En el momento del horrible suceso, Vásquez estaba con su primo Andy Chapa de 15. Los tres iban caminando cuando Pablo le aplastó la cabeza a David. Luego los primos llevaron su cuerpo hasta un campo donde le arrancaron el cuero cabelludo, cortaron uno de sus brazos y despellejaron su espalda. Luego le robaron y escondieron bajo unas planchas de aluminio.

Abogados defensores no pudieron demostrar que estaba loco.

Abogados defensores no pudieron demostrar que estaba loco.

De acuerdo a las transcripciones de la policía de un video donde Vásquez confiesa su crimen aparece que: «Escuché voces que me dijeron que bebiera la sangre del niño muerto». Sus abogados no pudieron demostrar que sus acciones fueron motivadas por enfermedad mental, por lo que fue ejecutado hace dos días por una inyección de pentobarbital a las 18:35 horas.

En declaraciones a la familia de Cárdenas desde el interior de la cámara de ejecución, Vásquez dijo: «Esta es la única forma en que puedo ser perdonado. Aquí tienen su justicia».

Después de haber sido atado a una camilla y administrada la dosis letal de medicamentos, Vásquez se quejó de sentirse mareado. Luego levantó la cabeza y miró hacia una ventana, donde vio a su familia. «Nos vemos en el otro lado», les dijo antes de caer inconsciente y ser declarado muerto 24 minutos después.

Esta ejecución ha sido la sexta del año en Texas, de las 11 que ya van en los Estados Unidos. En el país del norte, durante el año 2015 se ejecutó a 28 personas, la cifra más baja desde 1991, según el Centro de Información sobre la Pena de Muerte.


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