El político polaco Mateusz Piskorski fue arrestado el pasado 18 de mayo bajo el cargo de espiar a “terceros países”. Ello luego de escribir un artículo donde pronosticaba el aumento de la represión contra ciudadanos que critican la relación de la OTAN con países europeos.
Piskorski señaló que las predicciones sobre la próxima cumbre de la coalición a realizarse en julio, en Varsovia, han comenzado a indicar que el primer objetivo de la OTAN es “prevenir el surgimiento de movimientos sociales que exigen la liberación de Europa del tutelaje de Estados Unidos”.
El dirigente afirmó que las decisiones de la OTAN pretenden “socavar no sólo la soberanía de Varsovia en el campo de la política exterior”, sino que transformar al ente en una “fuerza policial, lista para participar en la pacificación de eventuales protestas”.
Piskorski advirtió que las palabras del brigadier general Krzysztof Krol, respecto a la existencia de “amenazas híbridas en el área de operaciones” de la alianza militar, siguen la misma línea: amenazas que podrían corresponder, por ejemplo, a la oposición a tratados como el TTIP en lo comercial.
“El malestar social, los disturbios, los paros e intentos de crear recursos de información independientes del establishment y exigir transparencia en las políticas de defensa y relaciones exteriores de las autoridades polacas”, son cosas que Piskorski identificó como enemigos domésticos de la OTAN, que hasta el momento han sido contrarrestados con la entrega de asistencia de todo tipo a los servicios de seguridad polacos.