En claro desafío a las condiciones dadas por el país del norte de América, en las que amenazó, – de no cumplirse-, con no entregar los aviones F-35 negociados con anterioridad, aun y cuando el país asiático es socio en su fabricación
El Ministerio de Defensa de Rusia informó que sus aviones realizaron este martes una nueva entrega de componentes de los sistemas antiaéreos S-400 a Turquía.
«El 16 de julio, en el marco del cumplimiento de los compromisos contractuales, los aviones de transporte militar del Ministerio de Defensa de Rusia suministraron otro lote de componentes de los sistemas de defensa antiaérea S-400 a Turquía», indicó el ministerio en un comunicado.
La autoridad castrense explicó que la entrega del equipamiento «se lleva a cabo en estricta conformidad con los términos del contrato firmado con Turquía y en el plazo acordado por las partes».
El Servicio Federal de Cooperación Técnica Militar de Rusia anunció a finales de junio que los suministros de los S-400 a Turquía concluirían en lo que resta de año.
A su vez, el Ministerio de Defensa de Turquía anunció este martes que el duodécimo avión con componentes de los sistemas antiaéreos rusos S-400 aterrizó en la base aérea turca de Murted.
La compra de los sistemas rusos S-400 provocó tensiones entre Turquía y Estados Unidos, que exigió que Ankara renunciara al armamento ruso y en vez de los S-400 comprara los sistemas estadounidenses Patriot.
Entre las razones que EE. UU. ha esgrimido al respecto, una de las causas es que, estos equipos son contrarios al sistema de defensa de la OTAN. De Igual forma, Estados Unidos por medio del jefe supremo de esta organización atlántica para Europa, el general estadounidense Tod Wolters, expresó su inquietud por la posibilidad de que el sistema antiaéreo S-400, que Turquía planeaba comprar a Rusia (ya un hecho), estudiara las capacidades del nuevo caza estadounidense F-35, por lo que el Pentágono declaró, en ese momento, que no recibirá (Ankara), los aviones estadounidenses.
Turquía aseguró en repetidas ocasiones que no renunciaría a la compra de los S-400, acordada en 2017, pese a la presión de EE. UU.
El S-400 (SA-21 Growler en la clasificación de la OTAN) es capaz de abatir aparatos aéreos de tecnología furtiva, misiles de crucero, misiles balísticos tácticos y táctico-operativos.
Con un alcance de hasta 400 kilómetros, el sistema ruso puede abatir blancos a alturas de hasta 30 kilómetros.
El 15 de julio durante su comparecencia en el Palacio Presidencial de Vahdettin en Estambul, el presidente Recep Tayyip Erdogan, se refirió al sistema antiaéreo S-400 y su relación con los aviones F-35 (de cuya fabricación es socio Turquía), manifestando que el S-400 es un sistema de defensa aérea y el F-35 como un arma de ataque. Por lo que no había incompatibilidad.
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