Boris Johnson, ex alcalde de Londres, no había emitido declaraciones tras el quiebre en la interna del Partido Conservador, ha señaló en la previa de su sorpresivo anunció que»las oportunidades que se abrirán cuando recuperemos la soberanía».
Agregó que «a la vista de las circunstancias en el Parlamento» y en el momento de sopesar quién será el líder de la era post-Brexit, recalcó que: «He llegado a la conclusión de que esa persona no puedo ser yo.»
Sin embargo, Johnson aseguró que «posible apoyo a la próxima Administración conservadora para asegurar que el mandato del pueblo se llegue a cumplir. Creo que este país puede ser mejor, más maravilloso y más grande de lo que ha sido hasta ahora», ha dicho en su lacónica línea de despedida.
«Tapado» con vía libre
La renuncia de Johnson deja el camino despejado a Michael Gove, que ha recalcado que «Brexit significa Brexit», en un pulso inesperado con la secretaria de Interior, Theresa May, que respaldó la permanencia y ahora se presenta como candidata de la unidad tomando el guante de Gove y reiterando que «Brexit significa Brexit».
El anuncio de la candidatura sorpresa de Gove se producía a las pocas horas de la filtración de un correo electrónico de su mujer, Sarah Vine, cuestionando la capacidad de Boris para ser primer ministro y las reservas expresadas por el propio Murdoch a su candidatura.
«Los británicos han rechazado la política de toda la vida y quieren otra manera de llevar el país«, dijo Gove en el momento de romper la baraja, anticipándose a sus dos rivales. «Tenemos grandes retos por delante, pero también grandes oportunidades. Podemos hacer un país más justo y más fuerte».
«He dicho en repetidas ocasiones que no quiero ser primer ministro«, recalcó Gove. «Ésa ha sido siempre mi intención. Pero todo lo ocurrido desde el pasado jueves me ha hecho cambiar de opinión».