Este domingo llegó al puerto español de Valencia, España el buque “Aquarius”, quien rescató 630 migrantes provenientes de la Unión Eurpea (UE).
Pero después de pocas horas llegó el navío italiano “Dattilo” con 274 migrantes, quienes al llegar fueron recibidos con fuertes aplausos.
Todos los migrantes fueron recibidos en la ciudad española por un amplio dispositivo integral que contó con más de 2 mil personas, entre ellos voluntarios de la Cruz Roja, médicos, intérpretes y cuerpos de seguridad.
Condiciones de los Migrantes
La mayoría de los migrantes son de África subsahariana y principalmente buscan refugio de la pobreza extrema, la guerra, los conflictos políticos o la persecución, aunque algunos pueden estar buscando una vida mejor en general.
Los que llegaron primero fueron considerados los más vulnerables, seis mujeres embarazadas, 20 niñas y niños que sufrieron quemaduras a través de una mezcla de combustible de barco y agua de mar.
El primer migrante que fue identificado fue un hombre de 29 años del país más joven del mundo, Sudán del sur, que ha sido afectado prácticamente por conflictos armados desde su división territorial en norte y sur.
Un equipo de traductores e intérpretes ingleses, franceses y árabes están a la mano, así como otro grupo de especialistas para atender las diferentes necesidades religiosas y culturales.
Los migrantes serán registrados en la policía nacional, dándoles un visado temporal de 45 días de duración, y luego serán entregados a diversas organizaciones benéficas e instituciones dirigidas por la ministra de trabajo, migraciones y seguridad social.
Entre tanto, autoridades del Estado prometen que ninguna de las familias serán separadas.
Mientras que, Emmanuel Macron presidente de Francia ha estado en contacto con España y se ofreció a aceptar a cualquier migrante que, habiendo pasado por el proceso de asilo inicial, expresará el deseo de vivir en Francia.
Dado que el número de inmigrantes son inseguros, vienen de guerras o han sufrido una grave pobreza, una gran parte de ellos pueden tomar la opción de vivir en Francia, donde la lengua no sería una barrera.
Entre tanto, el protocolo de reasentamiento de los refugiados en España incluye la vivienda, el mantenimiento será financiado por el Estado, así como la atención sanitaria, la educación, la enseñanza del idioma, la reconversión profesional o la formación, la escolarización de los niños, las actividades culturales y deportivas, traducción, servicios de salud mental y asesoramiento.