El ministro de Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, dijo hoy no disponer de una confirmación definitiva de la muerte a finales de mayo del líder del grupo terrorista Estado Islámico (EI), Abu Bakr al Bagdadi, que habría fallecido en un bombardeo ruso cerca de la ciudad siria de Al Raqa.
«Naturalmente, estoy al tanto de la información, pero no dispongo de una confirmación absoluta», dijo Lavrov en rueda de prensa.
El jefe de la diplomacia rusa agregó que las noticias sobre la muerte de líderes de grupos terroristas siempre «hacen mucho ruido» sin que esto repercuta en el funcionamiento de las organizaciones bajo su mando, que no tardan en «recuperar su capacidad de combate».
El Ministerio de Defensa de Rusia anunció hoy que Al Bagdadi habría muerto el pasado 28 de mayo en un ataque de la aviación rusa a las afueras de Al Raqa.
Por su parte, la coalición internacional liderada por EEUU no pudo confirmar esta información.
Según un comunicado de los militares rusos, en el ataque que acabó con la vida del líder del EI también murieron otros cabecillas del grupo terrorista, «además de 30 comandantes de rango medio y unos 300 guerrilleros».