La compañía farmacéutica alemana Bayer AG de Alemania recibió luz verde este martes 29 de mayo, por parte de la División Antimonopolio del Departamento de Justicia de los Estados Unidos, para fusionarse con el gigante de la agroquímica estadounidense Monsanto.
Se le ha exigido como condición que la farmacéutica venda unos 9.000 millones de dólares en activos; a fin de acabar con la mayor traba para la fusión que era un acuerdo de compra por 62.500 millones de dólares.
La intención según el CEO de Bayer, Werner Bauman, es crear una «empresa líder en agricultura, queremos ayudar a los agricultores de todo el mundo a cultivar alimentos más nutritivos de una manera más sostenible».
En el año fiscal 2017, Bayer empleó a alrededor de 99.800 personas y tuvo ventas de 35 mil millones de euros.
A mediados de marzo, la Unión Europea también aprobó esta fusión. Ahora Bayer busca la aprobación en regulaciones como Canadá y México.
El visto bueno de EE.UU. consolidaría la última de las tres megafusiones de la industria de semillas y pesticidas, que se gestan desde el año 2015.
Con esta unión dos terceras partes del mercado global de semillas y más del 70% del de pesticidas quedará en poder de solo cuatro compañías:
- Bayer-Monsanto (como empresa dominante).
- Corteva Agriscience (derivada de la fusión entre Dow y DuPont),
- La empresa formada por Syngenta (Suiza) y ChemChina.
- BASF, otro gigante alemán.