En una entrevista con la CNBC, Donald Trump, el virtual candidato a presidente del Partido Republicano después de que sus rivales abandonaran el barco, habló de lo que habla siempre, repitiendo sus eslóganes de campaña, mismo discurso, hablando mal de todo el mundo.
Así le dedicó algunos golpes a la jefa de la Reserva Federal, Janet Yellen. Si él es presidente la va a reemplazar. “Hace bien su trabajo” pero no es republicana, dijo.
También le pegó a China (otra vez) : “está matando a EE.UU.”, repitió en alusión al gigantesco déficit fiscal que mantiene Estados Unidos con el coloso asiático, y por las maniobras que hace Beijing con el tipo de cambio.
Claro, habló de inmigración, con ese tema del muro y de que a EE.UU sólo se podrá entrar legalmente.
Pero finalmente lanzó una seria advertencia que se salió del discurso habitual. Dijo que si él no gana su ticket a la Casa Blanca, la Corte Suprema se va llenar de tantos liberales que harán de los EE.UU. un “país totalmente diferente», como Argentina y Venezuela.
«Les diré que si no gano, tendremos una Corte Suprema que cambiará a este país a niveles que nunca han visto. Tendrán (magistrados) al estilo Bernies Sanders puestos en la Corte. Y este país será Argentina. Será algo tan diferente, que será Venezuela», dijo casi en tono burlón.
«No se tiene idea de lo qué ocurre en la Corte Suprema cuando se ven las diferencias en las decisiones, en las decisiones horrendas que se toman, que se quieren tomar y que se van a tomar, y que solo los detiene el hecho de que perdimos recientemente a un gran magistrado, que deberá ser reemplazado. Y el presidente, quien quiera que sea, tendrá que hacer 4 o 5 elecciones. Y si no elegimos a los magistrados correctos este país cambiará para siempre».