Ante las circunstancias adversas y el recrudecimiento de la guerra comercial que libran Estados Unidos y China, el país asiático podría considerar el traslado de la producción de sus empresas hacia Rusia.
La sugerencia la hizo el secretario general de la Asociación China para el Desarrollo en el Extranjero (CODA), He Zhenwei, de cara al Foro Económico Internacional en San Petersburgo 2019.
El funcionario señaló a RIA Novosti que actualmente «muchas de las compañías exportadoras de tamaño pequeño y medio» que se encuentran en China «se enfrentan a dificultades», puesto que Washington ha aumentado los aranceles sobre bienes de ese país del 10 % al 25 %, una situación que comparó con «cerrar las puertas».
Como se sabe, el comercio entre China y EE. UU. se basa principalmente en empresas de tamaño medio y pequeño, mientras que las grandes compañías estatales son las que tienen relaciones con Rusia en ese ámbito.
En este contexto y dado el deterioro de las relaciones entre Pekín y Washington, He Zhenwei sostiene que la propuesta de «trasladar su producción a Rusia» es oportuna, puesto que desde allí podrían continuar vendiendo sus bienes «a Estados Unidos y Europa».
«Ahora muchas empresas pequeñas y medianas de exportación han encontrado dificultades. Los Estados Unidos ya han aumentado sus impuestos del 10 % al 25 %, lo que equivale a puertas de entrada. Si solo los consumidores estadounidenses aceptan pagar más de sus billeteras, estas empresas podrán aumentar los precios de los productos en un 25 %. Lo que es poco probable«, dijo el experto.
Tensión y distensión, un juego belicista
En medio de este juego de tirar de la cuerda por los extremos, ambas potencias han ido adoptando medidas de contención, un juego pro belicista.
Por su lado, Estados Unidos incrementó del 10 % al 25 % las tarifas para una serie de mercancías chinas importadas, por valor de 200.000 millones de dólares al año, según ha informado el Registro Federal, el boletín oficial del Gobierno.
En respuesta, los chinos elevaron sus tarifas sobre importaciones estadounidenses por una cantidad que ronda los 60.000 millones de dólares.
A su vez, China analiza la potencial amenaza del presidente Donald Trump de imponer «en breve» aranceles del 25 % a otros productos chinos, por 325.000 millones de dólares que, de momento, no están sujetos a impuestos.
Mientras tanto, el comercio entre Rusia y China superó todos los pronósticos y creció un 25 % el año pasado, hasta 108.000 millones de dólares, según cifras publicadas en RT.
Alianzas estratégicas
En opinión del presidente de Rusia, Vladímir Putin, Pekín es y será el socio número uno de Moscú.
De cara al Foro Económico Internacional en San Petersburgo (SPIEF) 2019, evento a realizarse entre 6 y el 8 de junio, los presidentes de Rusia y China, Vladímir Putin y Xi Jinping, examinarán el miércoles en Moscú las relaciones con Estados Unidos, comunicó el asesor de la Presidencia rusa para asuntos internacionales, Yuri Ushakov.
«Los dos mandatarios examinarán, durante la visita de Xi a Rusia, la situación en Venezuela y en Siria, así como las relaciones con grandes potencias, incluido Estados Unidos «, dijo ante periodistas.
De acuerdo con el funcionario, se espera que en estos encuentros bilaterales se concrete la firma de al menos 30 acuerdos, así como una declaración sobre el fortalecimiento de la estabilidad estratégica.
«Hemos calculado que en el marco de la visita se firmará un voluminoso paquete de documentos intergubernamentales y comerciales —alrededor de 30— y también una declaración conjunta sobre el desarrollo de las relaciones bilaterales, la asociación estratégica y el fortalecimiento de la estabilidad estratégica en la época actual», dijo el asesor presidencial.
Asimismo, examinarán el tema del desarrollo de la Unión Económica Euroasiática y su conexión con la iniciativa china de la Franja y la Ruta.
El jefe del Gobierno ruso, Dmitri Medvédev, y el presidente de China discutirán el jueves 6 de junio en Moscú sobre las relaciones económicas entre los dos países, comunicó el servicio de prensa de Rusia.
«Las partes examinarán los aspectos clave de la cooperación económica y comercial, incluida la cooperación en energía, industria, tecnología, agricultura, turismo y transporte«, precisa el comunicado.
Medidas colaterales
Este lunes, China emitió una alerta sobre viajes a Estados Unidos en la que advierte a sus ciudadanos que planeen ir a ese país de que allí «han tenido lugar tiroteos, atracos y robos frecuentes últimamente», en clara alusión al trágico hecho del pasado viernes en Virginia.
En rueda de prensa, el portavoz de la cancillería, Geng Shuang, conminó a los ciudadanos y a las empresas chinas en EE. UU. a ser más cautos ante las «posibles situaciones», ya que «Estados Unidos ha impuesto muchas restricciones y ha acosado» a viajeros chinos en los últimos tiempos.
De acuerdo con cifras de la agencia noticiosa EFE, el número de turistas chinos que viajaron a Estados Unidos bajó en 2018 por primera vez en quince años, concretamente un 5,7 % del total, dejando la cifra en 2,9 millones.
El pasado mes de enero, Washington también pidió a sus ciudadanos que extremasen la precaución si decidían viajar al gigante asiático debido a «la aplicación arbitraria de las leyes locales» y al no reconocimiento de la doble nacionalidad.
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