Indiana prontamente será el hogar de la Primera Iglesia de Cannabis donde la mayor inspiración será la Marihuana y sus beneficios. La iniciativa, aprobada por la secretaria de Estado, Connie Lawson, se define como una corporación religiosa “basada en el amor, comprensión y la compasión para todos”
El fundador, Bill Levin, quien no se considera religioso, propuso la iglesia en respuesta a la polémica ley de libertad religiosa de Indiana, donde todos aseguran que discrimina a la comunidad homosexual. Además se refirió al consumo dentro del templo:
“Si alguien está fumando en nuestra iglesia, que Dios lo bendiga. Se trata de una iglesia para mostrar una manera apropiada de la vida, de una manera amorosa a vivir la vida”.
La nueva iglesia, de la que todos queremos ser ciervos, no ha incorporado doctrina alguna, de hecho ni siquiera el pecado es parte de sus fundamentos. Levin cree que “la mayoría de las religiones son engañadas por perversiones graves.” Y como la marihuana sigue siendo ilegal en Indiana, tanto para fines médicos y recreativos, solo los miembros de la Primera Iglesia de Cannabis tendrán la libertad para consumirla y dejarse ir por los cielos a través de su sacramento.
Con respecto a los textos sagrados, no será la Biblia ni el Corán los que guiarán los actos de los creyentes, sino que su creador afirma que tendrán un libro “bueno”, pero mientras afinan los detalles de su lanzamiento, los asistentes deberán leer la biblia educativa acerca de su sacramento número uno, El Emperador Desnudo: El Cáñamo y la conspiración de la marihuana”, un clásico libro de Jack Herer, publicado en 1985.