30 de abril de 2011, fallece a los 99 años de edad, en Buenos Aires, el escritor argentino Ernesto Sábato. Nacido en la localidad bonaerense de Rojas el 24 de junio de 1911, destacó por un firme compromiso político y ético que se aprecia en cada una de sus obras las cuales son testigo de su preocupación por la condición humana, la existencia, la soledad, la muerte, la desesperanza, la valentía y la esperanza.
Estudió física en la Universidad Nacional de la Plata y en 1938, año en el que recibe su doctorado en esta ciencia pura, se establece en París, Francia, para trabajar en el Laboratorio Curie hasta 1939.
Su vida en claves:
Sus obras: Debuta publicando Uno y el Universo (1946), colección de breves ensayos. Dos años más tarde publica su primera novela, El túnel. Le siguen Sobre héroes y tumbas (1961), Abaddón el exterminador (1974), con una visión apocalíptica de la realidad Argentina y Antes del fin, memorias publicada en 1998, en la que relata su infancia, estudios y sus preocupaciones a la política internacional. Su última obra publicada fue España en los diarios de mi vejez, fruto de su preriplo por España en 2002. Destacan también textos como: El caso Sábato; torturas y libertad de prensa; carta abierta al General Aramburu (1956) y El otro rostro del peronismo: carta abierta a Mario Amadeo (1956).
Activista: Desde la adolescencia se vinculó con la Federación Juvenil Comunista y a partir de allí inició su cruzada como defensor de los Derechos Humanos, manifestándose en contra de la dictadura. Estas acciónes lo llevan a presidir en 1984, en Argentina, la Comisión Nacional sobre Desaparición de Personas (CONADEP), para la cual redactó el Informe Sábato, que investigaba sobre los desaparecidos argentinos entre 1976 y 1982.
Reconocimientos: Entre los más importantes figuran el Premio Miguel de Cervantes de Literatura (1984) y el galardón Gabriela Mistral (1996). Además fue reconocido como Ciudadano Ilustre de la ciudad de Buenos Aires (1984), doctor honoris causa de la Universidad de Buenos Aires (1992) y doctor honoris causa por la Universidad de la República de Uruguay (1996). En los años 90 también se alzó con el Premio Internacional Menéndez Pelayo (1997) que exaltaba su creación literaria, artística y científica y en el 2002 recibió el Premio Rosalía de Castro. Como dato curioso, fue propuesto por la Sociedad General de Autores y Editores de España como candidato al Premio Nobel de Literatura de 2007 y en 2004 fue homenajeado durante el III Congreso de la Lengua, en la ciudad de Rosario (Argentina).
Anécdotas: En 1999 entró en circulación un sello postal ilustrado con la fotografía de Ernesto Sábato, en Argentina. Como pintor llegó a exponer una decena de sus obras pictóricas en 1989 en el Centro Pompidou de París y más tarde en Madrid.
Política: Afín al socialismo, fue duro en contra del terrorismo de ETA y alertó sobre la dramática situación de la infancia. Su ensayo La resistencia (2000), agotó los 100 mil ejemplares de su primera edición impresa rápidamente.
Infortunios: La muerte del mayor de sus dos hijos, Jorge, en un accidente de tráfico ocurrido en 1995 y el fallecimiento de su primera esposa, Matilde en 1998, marcaron una vida que de tanto en tanto sucumbia ante el sufrimiento y la ansiedad. De hecho el autor llegó decir que si no hubiese sido por el arte y la escritura se habría quitado la vida. Para apalear la tristeza, sus últimos años los vivió con su segunda mujer, Elvira González Fraga.