La infanta Cristina de Borbón será juzgada como cooperadora necesaria de dos delitos fiscales cometidos presuntamente por su marido, Iñaki Urdangarin, en el marco del caso Nóos. Así lo decidió la Audiencia Provincial de Palma, que rechazó la petición de la defensa y de la Fiscalía Anticorrupción de eximir a la hermana del rey de España del juicio, alegando la ‘doctrina Botín’. Esta resolución implica que la infanta volverá a sentarse en el banco de los acusados el próximo 9 de febrero.
Los abogados de la hermana de rey Felipe VI alegaron que la demanda de la fundación carecía de validez por estar interpuesta en solitaria, pero el tribual considera que Manos Limpias está en su derecho de acusar el caso.
El juzgado decidió que la infanta debe explicar su implicación en los dos delitos fiscales presuntamente cometidos por su marido, Iñaki Urdangarin, por lo que la fundación pide ocho años de prisión, mientras que la Fiscalía pide una condena de 19 años.