Dos abuelos de 67 y 68 años fueron detenidos por las autoridades policiales, luego de que se les acusara de haber robado más de 30 oficinas en Barcelona, España.
Los jubilados que recibían pensiones mínimas, decidieron acudir en las noches, a edificios de oficina cerrados para llevarse equipos electrónicos y dinero en efectivo señalaron las autoridades catalanas.
La detención la realizaron los Mossos d`Esquadra (Policía catalana), luego de un trabajo de investigación que se extendió por más de un año.
Los dos sexagenarios se conocieron en una subasta y desde ahí comenzaron a planificar sus golpes en los edificios de oficina, luego de un detallado estudio de las rutinas de sus ocupantes.
La planificación de los robos era sencilla, señalan las autoridades. Los hombres se dedicaban a estudiar las rutinas de los ocupantes y anotar sus horas de salida. Cuando las oficinas se encontraban solas, se aseguraban que no quedara nadie adentro y forzaban las puertas para cargar pequeños equipos electrónicos y el dinero en efectivo que encontraban.
Lo que no tomaron en cuenta los dos jubilados, es que sus acciones quedaron grabadas en varias cámaras de vigilancia, que permitió su identificación y posterior detención.
Uno de los detenidos tenía un alto nivel de vida, ya que vivía en un chalet con piscina y coleccionaba artículos de guerra. Ambos fueron ingresados a la cárcel luego de la acusación de la fiscalía.
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