Los niños menores de 14 años pudieron salir este domingo a jugar a la calle por primera vez tras más de 40 días de confinamiento en España, un hito que tuvo una contraparte negativa, ya que a lo largo de la jornada se produjeron aglomeraciones puntuales.
«Las imágenes me despiertan alegría porque poco a poco vamos a poder volver a una vida normal, pero también me despiertan preocupación, porque hay que dejar claro que estas medidas de desconfinamiento no implican todavía que se pueda hacer todo lo que queramos», dijo este lunes en rueda de prensa Fernando Simón, director del centro de emergencias del Ministerio de Sanidad.
La salida de niños a la calle es un reflejo de la ralentización de la epidemia de covid-19, pero la constatación de que en algunos lugares no se siguieron las recomendaciones sanitarias arroja una sombra de preocupación sobre los escenarios de desescalada.
Las pautas establecidas por las autoridades españolas para estos paseos siguen la llamada «norma de los cuatro unos», ya que los menores pueden salir a la calle sólo una vez al día, acompañados de un adulto, sin alejarse más de un kilómetro de su domicilio y por una hora como máximo.
Durante esos paseos se debe mantener una distancia interpersonal de al menos dos metros con terceros y, por supuesto, tanto antes como después se deben seguir las recomendaciones generales de lavado de manos e higiene personal.
Por norma general las salidas de niños siguieron estas pautas, aunque en algunos lugares especialmente susceptibles de sufrir aglomeraciones como parques, paseos marítimos o avenidas peatonales fue más difícil garantizar el cumplimiento de las recomendaciones sanitarias.
«Me llegan comentarios alarmantes de la salida de los niños y las niñas a las calles. Estemos en máxima alerta, hace falta extremar las precauciones», comentó el domingo el presidente catalán, Quim Torra.
La ciudad de Valencia fue uno de los puntos donde se detectaron más comportamientos imprudentes, llegándose a ver incluso imágenes de menores jugando partidos de fútbol en parques, algo completamente prohibido, lo que llevó a las autoridades locales a plantearse el cierre de zonas verdes.
«Abrimos los jardines para pasear por entornos agradables, no para jugar a fútbol», dijo a través de un mensaje en redes sociales la vicealcaldesa de Valencia, Sandra Gómez, que lanzó una advertencia subrayando que «lo que no funcione se dará marcha atrás».
Ante estas situaciones, Fernando Simón concluyó que las autoridades sanitarias extraen la lección de que «tendremos que ser mucho más cuidadosos cuando abramos la puerta a volúmenes más importantes de población».
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, tiene previsto presentar este martes un plan en el que se fijarán los criterios para la desescalada del confinamiento en las próximas semanas.
Por el momento no se conocen demasiados detalles del plan más allá de que se buscará una desescalada gradual y asimétrica en función de las necesidades de los distintos territorios.
A ese respecto, la única propuesta concreta puesta sobre la mesa consiste en permitir salidas para hacer deporte a partir del 2 de mayo, aunque Sánchez detalló en su última comparecencia que esta propuesta está condicionada a la evolución de la pandemia en los próximos días.
«Hasta hace unos días estábamos haciendo lo duro pero fácil, lo difícil es lo que vamos a hacer ahora, que es cuando cada uno tiene que demostrar su responsabilidad individual para garantizar que esa apertura progresiva no se traduzca en un riesgo para la población», añadió Fernando Simón este lunes.
Según los últimos datos del Ministerio de Sanidad, España acumula ya 23.521 fallecidos por coronavirus y 209.465 positivos confirmados por pruebas de PCR.
Pese al gran daño causado por la enfermedad, en los últimos días se produjeron algunos datos positivos, como el hecho de que ya se acumulan cuatro días consecutivos en los que el número de personas curadas supera al de nuevos diagnósticos, lo que motiva la decisión del Gobierno de empezar a diseñar la desescalada.
Fuente: Sputnik
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