Iñaki Urdangarin, esposo de la infanta Cristina de Borbón y cuñado del rey Felipe VI, ingresó sobre las 8:15 hora local en la cárcel de Brieva, en la provincia de Avila, a unos 100 kilómetros de Madrid, para cumplir su condena de 5 años y 10 meses.
Según fuentes penitenciarias, la cárcel es un centro de mujeres que tiene un módulo para hombres y cumplirá la condena en un pabellón especial con cinco celdas, patio propio y comedor.
Urdangarin es el primer familiar del rey español que entra en prisión y lo hace a raíz del llamado «caso Nóos», un escándalo de corrupción que lo llevó ala justicia en 2016 junto a la infanta Cristina, quien fue absuelta por el tribunal.
La semana pasada la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Palma dio cinco días a Urdangarin para entrar en la cárcel que él mismo eligiese, y este domingo llegó a Madrid procedente de Ginebra, Suiza.
Un duro golpe para la casa real
Tal y como establece el protocolo habitual, tras su entrada en la cárcel de Brieva será examinado por un equipo médico y psicológico y a partir de entonces se abrirá un plazo máximo de dos meses para decidir su situación penitenciaria.
Hoy concluía el plazo que la Justicia española dio al cuñado del rey para entrar en prisión tras la sentencia firme del Tribunal Supremo.
El «caso Nóos» supuso a partir de 2010 un golpe para el entonces rey Juan Carlos I, quien abdicó cuatro años después a favor de su hijo Felipe. Con la llegada del nuevo monarca, tanto Cristina como su hermana Elena quedaron fuera del núcleo de la familia real española.
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