El secretario de Defensa de Estados Unidos, James Mattis, sostuvo ste viernes que «ninguna Nación puede ni debería dominar la zona Indo-Pacífico» y al mismo tiempo aseguró que el personal norteamericano no se retirará de la región, «porque esas arterias marítimas de importancia económica son para todos», en alusión a la prepondería de China en la región.
El Jefe del Pentágono ofreció un discurso en la sesión plenaria de la cumbre asiática, dedicada a cuestiones de seguridad y organizada por el Instituto Internacional de Estudios Estratégicos (IISS, por su sigla en inglés).
Durante su intervención en la Cumbre, que se desarrolla en Singapur entre el 1 y el 3 de junio, Mattis habló sobre el liderazgo de Washington y los desafíos para la seguridad en la región del Indo-Pacífico, según reseñó el portal de Rusia Today (RT).
Mattis condenó al Gobierno de Beijing por la militarización de las islas artificiales en el mar de la China Meridional, acusándolo de «intimidación y coerción» en la región del Indo-Pacífico. No obstante, señaló que EE.UU. está preparado para «apoyar las decisiones de China si promueven la paz a largo plazo y la prosperidad para toda esa región dinámica».
Además, el Secretario de Defensa dejó en claro que EE.UU. no espera que los países de la Región elijan entre Washington y Pekín, ya que el gigante asiático «tiene voz en la formación del sistema internacional y todos sus vecinos tienen también voz para modelar el papel de China».
Según Mattis, la prioridad para EE.UU. es el desarrollo de relaciones «entre los militares y entre las economías», y la cooperación con la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático. «Las esperanzas del mundo están puestas en las negociaciones con Corea del Norte», aseveró.
En lo que concierne a la política de Washington en torno a Corea del Norte, el Jefe del Pentágono aseguró que el Gobierno estadounidense aboga por el diálogo y los esfuerzos diplomáticos.
En ese sentido, Mattis mencionó la reunión entre su presidente Donald Trump y el líder norcoreano, Kim Jong-un, prevista para el 12 de junio. «Las esperanzas del Mundo están puestas en esas negociaciones» y en la «completa y verificable desnuclearización de la península de Corea».
Con respecto a la presencia de militares estadounidenses en Corea del Sur, Mattis indicó que la cuestión no estará ni debería estar sobre la mesa durante la reunión entre Trump y Kim Jong-un.