La carrera por la vacuna contra el coronavirus COVID-19 ha desatado un enfrentamiento entre Estados Unidos y Alemania. El presidente norteamericano, Donald Trump, busca convencer a científicos alemanes que investigan el posible desarrollo de una vacuna contra la pandemia de que trabajen exclusivamente su país.
Esto ha llevado a los políticos alemanes a insistir en que ningún país debería tener el monopolio de ninguna vacuna futura, según publica el dominical alemán Welt am Sonntag.
El diario, que cita a fuentes del Gobierno alemán, aseguró que Trump habría ofrecido grandes cantidades de dinero a la farmacéutica CureVac para monopolizar el resultado de las investigaciones.
“El gobierno alemán está muy interesado en garantizar que las vacunas y las sustancias activas contra el nuevo coronavirus también se desarrollen en Alemania y Europa”, dijo por su parte, una portavoz del Ministerio de Salud, quien confirmó también que el ejecutivo se encuentra en conversaciones con CureVac.
Welt am Sonntag también citó a una fuente no identificada del gobierno alemán que afirma que Trump estaba tratando de asegurar el trabajo de los científicos en exclusiva y que haría cualquier cosa para obtener una vacuna para los Estados Unidos, “pero solo para los Estados Unidos”.
Karl Lauterbach, profesor de economía de la salud y epidemiología quien también es legislador alemán condenó las intenciones de Washington de monopolizar la vacuna.
“La venta exclusiva de una posible vacuna a los EE. UU. debe evitarse por todos los medios. El capitalismo tiene límites”, dijo en un mensaje publicado en su cuenta en Twitter.
La empresa CureVac tiene su sede en Tubinga, al oeste de Alemania y trabaja junto con el instituto Paul Ehrlich de vacunas y biomedicina en el desarrollo de una posible vacuna contra el coronavirus.
Un comunicado publicado por la empresa a principios de mes asegura que un ejecutivo de la empresa fue invitado a la Casa Blanca “para discutir estrategias y oportunidades para el desarrollo rápido y la producción de una vacuna contra el coronavirus”.
El presidente, Donald Trump, el vicepresidente, Mike Pence, y miembros de la comisión estadounidense de lucha contra el virus participaron en el encuentro, según la nota de CureVac, reseñada por La Vanguardia.
“Tenemos mucha confianza en que podremos desarrollar una vacuna potente en los próximos meses”, indicó el entonces directo de la farmacéutica, Daniel Menichella, quien recientemente fue reemplazado.
Ante la polémica desatada, CureVac emitió un comunicado este domingo, en el que afirmó que “la compañía rechaza los rumores actuales de una adquisición”.
La empresa admitió que estaba en contacto con muchas organizaciones y autoridades de todo el mundo, pero no hizo comentarios sobre especulaciones y rechazó “acusaciones sobre ofertas de adquisición de la compañía o su tecnología”.
La compañía privada, espera tener una vacuna experimental lista para junio o julio, para entonces buscar el visto bueno de los reguladores con el fin de realizar pruebas en humanos.
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