Miles de estadounidenses tomaron las calles de la ciudad Washington DC para exigir al Congreso de ese país implemente una legislación sobre el control de armas, especialmente las de asalto, por ser las que son utilizadas con más frecuencia en los tiroteos.
Asimismo, piden el fortalecimiento del sistema de verificación de antecedentes para los compradores en línea o en exhibiciones.
En varias ciudades de Estados Unidos se realizaron multitudinarias movilizaciones de la denominada Marcha por Nuestras Vidas (March Four Our Lives), se calcula que unas 30 mil personas asistieron a la convocatoria.
La actividad es una iniciativa del movimiento Nunca Más, integrado por los sobrevivientes del tiroteo del pasado 14 de febrero en la escuela de la ciudad de Parkland y contó con la colaboración económica de reconocidas celebridades Hollywood como George Clooney y Steven Spielberg.
La convocatoria plantea movilizaciones en 700 ciudades estadounidenses y en más de 800 lugares del mundo, entre ellos Sídney, Tokio, Mumbai y Londres.
Doble Rasero
El 12 de marzo de este año el presidente Trump detuvo la propuesta para incrementar la edad para la compra de armas, con el argumento de que esta decisión depende de los 50 estados del país y no del Gobierno Federal e insistió en su plan de armar a los profesores.
Actualmente, de acuerdo con la Ley Federal de Estados Unidos la edad mínima para adquirir un arma de fuego son 21 años (si se trata de una pistola) y 18 (si es un rifle). Sin embargo, algunos vendedores que no cuentan con una licencia comercializan armamento a personas con menos edad.
«En los límites de edad de 18 a 21 años, estamos atentos a los casos en los tribunales y a sus sentencias antes de actuar. Los estados están tomando esta decisión. Las cosas se están movimiento rápidamente en esto, pero no hay mucho apoyo político», dijo Trump
El estado de Florida, donde el 14 de febrero un tiroteo en una escuela dejó 17 muertos, aprobó una ley que permitirá aumentar de 18 a 21 años la edad mínima para comprar armas. La Asociación Nacional del Rifle (NRA) interpuso una demanda en la que acusa a ese estado de violar el derecho establecido en la Constitución de portar armas.