El mandatario de los estados unidos de Norteamérica suscribió el pasado viernes, tres órdenes ejecutivas las cuales van en detrimento de la seguridad laboral de los trabajadores públicos de ese país, en las mismas se da más facilidad a los despidos e incide directamente en el tiempo que el trabajadores puede darle a sus actividades sindicales, hecho que atenta de forma importante en la búsqueda de las mejoras salariales por estas organizaciones.
Trump contra estabilidad de trabajadores públicos
Esta decisión, el presidente Trump la venia asomando desde la campaña presidencial donde en repetidas oportunidades dejo entrever su intención de disminuir la carga laboral de la estructura burocrática administrativa de Washington, al que ha acusado de ser una organismo donde reina el “derroche, fraude y abuso”.
En este sentido ya en enero del presente año, en el primer discurso respecto del estado de la unión, el presidente exigió al Congreso el pronto empoderamiento de los secretarios del gobierno con la autoridad suficiente, de dar incentivos a los buenos empleados y también la de echar a los trabajadores que deshonren la confianza depositada por la administración pública y por consiguiente la del pueblo de EE.UU.
Se disminuyen los tiempos
Como primera medida es ahora mucho mas rápido y fácil prescindir de un trabajador que haya, según el criterio, ejecutado actos de «mal comportamiento», quedando de forma explícito que el tiempo de gracia para la corrección de dicha acción anómala queda reducido de 120 a 30 días .
El presidente de Estados Unidos también sostiene que es inviable que actualmente tome entre seis meses y un año echar a un empleado, sin contar los ocho meses de acción legal.
La segunda medida exige a los departamentos y agencias recortar por debajo de un año los periodos de negociación de los contratos con los sindicatos representantes de los trabajadores.
Ya por último, la tercera orden reduce a un máximo del 25% de la jornada laboral el tiempo destinado por parte de los trabajadores para dedicarse a sus actividades sindicales, derecho que ha sido consagrado por el Congreso de ese país desde hace 40 años.