Trump impone nueva narrativa en su país sobre conflictos con la retirada de tropas en Siria

Brett McGurk, el enviado especial de EE.UU. aseguró que nadie está declarando misión cumplida, al hacer referencia a la coalición mundial para derrotar al EI, hace dos semanas

Charilin Romero

21/12/2018 3:14pm

La retirada de las tropas terrestres estadounidenses en Siria, decisión asumida y anunciada por Donald Trump y en la que sostuvo que habrá la derrota del Estado islámico (EI), puede traer consigo graves consecuencias para la región, advierten analistas.

Para el periodista especializado en Defensa y Diplomacia de la BBC Jonathan Marcus, al destacar que una nueva narrativa se ha impuesto entre las voces más estridentes de la política exterior de Trump.

En cambio, Brett McGurk, el enviado especial de EE. UU. aseguró que nadie está declarando misión cumplida, al hacer referencia a la coalición mundial para derrotar al EI, hace dos semanas.

Sin embargo, en los últimos meses se ha ido imponiendo una nueva narrativa entre las voces más estridentes de la política exterior del gobierno de Trump y su alegato está dirigido a que una presencia de largo plazo en Siria ayudaría a contener a Irán y a contrarrestar la creciente influencia de Rusia en la región.

El Jefe de la Casa Blanca está inconforme con retirar a las tropas que fueron enviadas al territorio árabe en 2015 por Barack Obama

Los diversos intentos fallidos de Trump de armar a los grupos anti Estado Islámico y que terminaron en caos, ha hecho que el Jefe de la Casa Blanca de manera inconforme retirara las tropas que fueron enviadas al territorio árabe en 2015 por Barack Obama para entrenar y asesorar en fuerzas especiales a combatientes kurdos que luchaban contra el EI.

Aunque los militares llegaron a Siria en un grupo pequeño, el componente militar estadounidense se incrementó a más de 2 mil. Hay quienes creen que el número de estos sea mayor, debido a la red de bases y pistas de aterrizaje establecido en un arco a lo largo del noreste del país.

Pese a la estrategia de los estados Unidos para contener a Irán y la influencia de Rusia en la región, se contrapone a que Bashar al Assad, presidente de Siria, se mantiene recibiendo apoyo de sus aliados en Moscú y Teherán. Pero, esto es lo que preocupa a Trump, debido a que los dos mil soldados norteamericanos podrían ser una fuerza pequeña para imponerse.

Otros analistas podrían asegurar que la presencia de tropas otorga a Estados Unidos un rol importante, porque en algunos momentos se han involucrado en enfrentamientos directos con milicias proiraníes y contratistas militares rusos que intentaron atacar las posiciones de sus aliados.

Una nueva fase en la guerra civil podría resurgir con mayor fuerza

Ante ese escenario, Trump intentará dejar fuera de control al presidente al Assad y sus aliados, derrotando al Estado Islámico y de esa manera lograr que surja una nueva fase de la guerra civil, si emerge una fuerza similar o que estaría relacionado con el EI, cuyos grupos están en la mira por Turquía por parecerles una amenaza.

Además, el cambio de la política de Trump ocurre en un momento en que Washington y Ankara presentan una nueva serie de tensiones, mientras que las autoridades turcas advierten que planean atacar más a Siria y su objetivo son los kurdos. Al final se aprecia que el Medio Oriente dejó de ser estratégico para Estados Unidos, pese a que sigue siendo esta región inestable y de relevancia para los aliados europeos y cercanos a la nación norteamericana.

No obstante, sigue siendo una región de gran inestabilidad y de enorme importancia para los más cercanos aliados europeos de Washington, que enfrentan numerosos problemas en el Mediterráneo.

Así que Washington necesita una política coherente, que se extienda más allá de un simple eslogan de «contener a Irán».

Asimismo, se aprecia que la política norteamericana está alineada con Arabia Saudita e Israel, quienes están aprovechando la debilidad percibida de Washington en la región para promover sus propias opiniones políticas. También esta decisión de Trump revierte las líneas oficiales ensayadas en el Pentágono y en el Departamento de Estado, y pone a los aliados kurdos de Washington en mayor peligro.