El «gobierno interino» encabezado desde enero de 2019 por el opositor Juan Guaidó en Venezuela, promovido por Estados Unidos, debe “desaparecer” porque “se ha deformado”, aseveró el político de derecha Julio Borges, al tiempo que anunció su renuncia al cargo de Comisionado de Relaciones Internacionales de ese equipo.
Las declaraciones surgen dos semanas después de una aplastante derrota opositora en las elecciones regionales. Borges subrayó que se han dado “demasiados errores y escándalos”, y es que, a su juicio, los factores opuestos al gobierno de Nicolás Maduro enfrentan serias “contradicciones y falta de rumbo”.
«La noción del gobierno interino tiene que desaparecer completamente, no podemos seguir con una nómina, con una burocracia que el año pasado llegó a casi 1.600 personas, nosotros pedimos eliminar eso completamente», dijo Borges a periodistas durante una videoconferencia desde Colombia en la que renunció a su cargo como colaborador de Guaidó, reseñó AFP.
La estrategia de Guaidó se debilita más con salida de Borges
El Gobierno interino de Juan Guaidó, la estructura institucional que se creó en paralelo para tratar de derrocar al presidente Nicolás Maduro en Venezuela, comienza a resquebrajarse desde dentro, indicó, por su parte, una análisis dl diario español El País.
El político Julio Borges, uno de sus miembros más destacados, anunció este domingo que abandona esta forma de resistencia al considerar que se ha convertido más en un problema que en una solución. Es más, pidió la desaparición total del Gobierno en sí mismo. “No hay ruta, no hay unidad y no hay estrategia”, dijo Borges durante el anuncio de su renuncia.
“Los objetivos del interinato no se han cumplido. Guidó logró un inmenso respaldo internacional en el 2019, que sumado a las protestas en el interior del país pusieron en jaque a Maduro”, indicó El País.
Agregó que “el chavismo, sin embargo, resistió. Tres años después, la lucha se ha desinflado y el sucesor de Hugo Chávez parece atornillado en el poder, a pesar de la inestabilidad económica y social del país”.
Borges dijo que “hemos perdido el apoyo internacional porque ha habido contradicciones, errores y eso ha hecho que el mundo haya puesto el caso venezolano en la nevera”. A su modo de ver, hay que reconstruir la oposición para que el antichavismo gane legitimidad dentro y fuera de Venezuela.