La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha presentado esta semana un ambicioso plan destinado a aumentar significativamente el gasto en defensa en la Unión Europea. Ante los crecientes desafíos geopolíticos y el retiro progresivo de apoyo militar por parte de Estados Unidos, Von der Leyen aboga por un fortalecimiento de las capacidades defensivas de Europa, con un enfoque en la cooperación intergubernamental y la movilización de recursos clave. El plan, denominado Rearmar Europa, contempla una serie de medidas financieras que, en conjunto, podrían movilizar cerca de 800.000 millones de euros para mejorar la seguridad del continente.
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Una de las piezas clave del plan es la creación de un instrumento financiero innovador que permitirá a los Estados miembros acceder a hasta 150.000 millones de euros en préstamos, respaldados por el presupuesto común de la UE. Este mecanismo tiene como objetivo impulsar la inversión en áreas críticas como la defensa aérea, los sistemas de misiles, la protección de infraestructuras estratégicas y la ciberseguridad. Según Von der Leyen, esta medida busca optimizar los recursos disponibles y fomentar una compra conjunta entre los países de la UE, lo que contribuiría a una mayor eficiencia en el gasto.
En un intento por facilitar la financiación de este ambicioso plan, la Comisión Europea activará las «cláusulas de escape» del Pacto de Estabilidad y Crecimiento. Estas cláusulas permitirán excluir los gastos en defensa del cálculo del déficit público de los Estados miembros, lo que aliviará las restricciones fiscales y permitirá un mayor margen de maniobra para aumentar la inversión en seguridad sin comprometer los estándares económicos del bloque.
En su carta dirigida a los líderes de la UE, Von der Leyen propuso también la posibilidad de redirigir fondos de cohesión destinados al desarrollo económico de las regiones menos favorecidas hacia proyectos de defensa. Esta medida permitiría a los gobiernos europeos incrementar sus capacidades militares mediante incentivos financieros, flexibilizando las normativas para las grandes empresas del sector de defensa y facilitando el uso de estos fondos para la compra de tecnología avanzada.
El Banco Europeo de Inversiones (BEI) jugará un papel central en el financiamiento del plan. Von der Leyen destacó la importancia de asegurar la inversión de los ahorros europeos en mercados dentro de la UE y subrayó que el BEI tiene una función clave en la financiación de las capacidades defensivas del continente. A través de nuevas iniciativas y cambios en su estructura financiera, el BEI contribuirá a asegurar que los recursos estén disponibles para los proyectos de defensa más urgentes.
El plan Rearmar Europa subraya la necesidad de que la UE no dependa exclusivamente de actores externos para su seguridad. Von der Leyen enfatizó que, con la creciente incertidumbre internacional, Europa debe estar preparada para defenderse por sí misma y asegurar su autonomía estratégica. Esta estrategia no solo es una respuesta a las tensiones con Rusia y otros actores globales, sino también una señal de que Europa está tomando en serio su futuro en un entorno geopolítico cambiante.
Foto: El Ciudadano
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