Diez millones de litros de cerveza almacenados en fábricas, principalmente de barril, desechará la industria francesa, como resultado del aislamiento domiciliario, la falta de puntos de distribución y el cierre de negocios por el Covid-19.
Maxime Costilhes, gerente general del Sindicato Brasseurs de France, dijo que la razón principal de esta destrucción es que, a diferencia de las cervezas clásicas, este producto después de tres meses de conservación pierde su efecto olfativo y gustativo, reseñó la revista Forbes Colombia.
Alertó el sindicato que 70% de las cervecerías ha perdido más del 50% de su facturación, por lo que pidieron al gobierno un plan para incentivar el turismo, “para evitar la pérdida de miles de empleos, directos e indirectos” de este sector.
El cierre obligado de cafés, restaurantes, la paralización de la actividad turística y la anulación de todos los festivales y salones, ha incidido en que la bebida etílica no se haya consumido, reseñó la agencia AFP.
El motivo principal de la destrucción del producto es que la cerveza más popular no suele estar pasteurizada, por lo que con el paso del tiempo se echa a perder.
Costilhes destacó que actualmente el sector está “muy endeudado”, ya que se invirtieron 241 millones de euros en la producción de 2019, con la cual esperaban ganancias de 4.000 millones de euros.
A través de una consulta a casi 300 empresas (que representan el 98% de todo el mercado francés), el sindicato corroboró el impacto de la crisis sanitaria en la industria cervecera del país, destacando que una de cada cuatro cervecerías “está completamente cerrada”.
Asimismo, este instrumento arrojó que el 40% de la industria ha tenido una disminución de al menos 60% en su producción, porque aún no han podido vender la producción de esta temporada, la cual ha dejado una acumulación que podría durar hasta la siguiente.
Industria mexicana también afectada
Por otra parte, ya que en México la industria cervecera no está catalogada como esencial, la interrupción de su producción ha impactado a los consumidores nacionales debido a la escasez del producto y costos elevados, reseñó el diario El Imparcial
También los distribuidores, como pequeños comercios, tiendas de conveniencia, supermercados y plataformas de ventas en línea se están viendo afectados por su desabasto.
La directora general de Cerveceros de México, Karla Siqueiros, señaló “Lo que hay es lo que se distribuyó antes de que se parara la producción, nosotros dejamos de producir, de distribuir, el problema o lo que se está viendo de escasez es por la capacidad que tienen los propios negocios de almacenar (…) desde que paramos el 6 de abril no ha salido ninguna cerveza de ninguna planta o centro de distribución”.