Venían con la intensión de conocer la verdad y transmitirla al mundo sobre lo que realmente está pasando en Honduras en el marco de la actual crisis política derivada de las elecciones del domingo 26 de noviembre.
Reed Lindsay, de Estados Unidos; Edward Augustin, de Gran Bretaña y Jihan Hafiz, de Nueva Zelanda, llegaron ayer lunes al aeropuerto Toncontín de Tegucigalpa, a las 12:25 meridiano, sin imaginarse que los iban a remitir a un cuarto migratorio, sin darles la oportunidad de cumplir con su función de informar.
Los tres periodistas fueron sometidos a una extensa jornada de interrogatorios. Sin embargo 23 horas más tarde fueron expulsados del territorio hondureño.
Una potencial hipótesis para que se les haya expulsado, según el análisis de CRITERIO es que los periodistas venían de Cuba donde habían permanecido en los últimos días y porque el estadounidense Reed Lindsay, fue el corresponsal de la televisora estatal de Venezuela, TeleSur, durante el golpe de Estado de 2009. Posiblemente este fue el detonante para que el régimen de Juan Hernández, haya temido ante su presencia, ya que tanto Cuba como Venezuela han sido declarados por su mandato como sus enemigos políticos.
Lindsay, quien es productor independiente y periodista freelance, nos contó que el personal de Migración inventó que tenía alerta por parte de Interpol por el extravió de su pasaporte en el año 2016 en Alemania. “Pero yo no he ido a Alemania desde hace 20 años y no perdí mi pasaporte ni lo reporté perdido”, nos comentó.
En tanto a sus compañeros Edward Augustin y Jihan Hafiz, no les expusieron ningún motivo para su expulsión.
La apoderada legal del Comité por la Libre Expresión (C-Libre) Kenia Oliva, quien maliciosamente fue inducida para interponer un recurso de Habeas Corpus de manera extemporánea, porque se le dio información incorrecta, lamentó lo que ocurrió con los comunicadores sociales extranjeros.
Oliva nos contó que el delegado de Migración argumentó que los periodistas no se acreditaron como tal, sino que lo hicieron como simples turistas y que tampoco tenían una dirección prevista en Honduras.
Pese a que C-Libre se comprometió a ser el garante de su estadía tampoco se aceptó dicha condición, y se optó por hacer la expulsión.
En cuanto a la alerta rojo de Interpol sobre el periodista estadounidense, dijo que C-Libre logró comprobar que la información era falsa, porque el número de pasaporte no es el mismo y que en efecto existió una denuncia de extravió pero en India.
En cuando a los otros dos periodistas, dijo que no existió ningún problema con ellos, “pero las autoridades de Migración decidieron expulsarlos del país el día de hoy”.
Oliva agotó todas las instancias legales e interpuso un recurso de Habeas Corpus y está a la espera que un juez ejecutor rinda un informe, pero adelantó que las autoridades migratorias han cometido un abuso.
El recurso de Habeas Corpus no se interpuso en su debido momento porque ayer se les informó que no existía ningún problema, sin embargo hasta “hoy nos enteramos que continuaban en el aeropuerto y no se nos permitió ingresar para verificar su estado de salud, tal y como lo establece la ley”, explicó la abogada.
El Gobierno de Honduras expulsó el pasado 17 de noviembre de su territorio al grupo venezolano de música protesta “Los Guaraguao”, aduciendo que no habían cumplido con lo estipulado en la ley migratoria porque al momento de su ingreso lo hicieron como turista y al final se comprobó que venían a realizar una jornada de conciertos en el marco del cierre de campaña de la Alianza de Oposición contra la Dictadura.
A juicio de la apoderada legal de C-Libre, la situación que se vive actualmente en Honduras es producto de una dictadura que no le importa verse mal ante las violaciones de derechos humanos.
Otra de la intención del oficialismo, según Oliva, es cerrar el cerco mediático con los medios de comunicación que el gobierno manipula.