Este martes el aeropuerto internacional de Al Hudeida fue conquistado por las fuerzas gubernamentales yemeníes, con el apoyo de la coalición árabe liderada por Arabia Saudí, con esta acción conquistaron , una ciudad estratégica controlada por los rebeldes hutíes en la costa del mar Rojo.
Los insurgentes hutíes huyeron del aeropuerto y se replegaron al centro de la urbe, dijo el general de brigada Abuzaraa al Mahrabi, comandante del ejército yemení en el frente occidental, citado por la agencia oficial SABA.
El comandante acusó a los rebeldes de pretender “usar a los habitantes como escudos humanos”, y aseguró que han apostado francotiradores en las azoteas de los hoteles y edificios altos en los barrios adyacentes al aeropuerto.
Es el segundo intento de las fuerzas gubernamentales yemeníes de hacerse con el control del complejo, el cual cuenta con instalaciones estratégicas que incluye un terminal de pasajeros, un aeropuerto militar y cuarteles.
En una primera acción militar que se desarrolló el sábado, el gobierno se hizo con el control del aeropuerto, pero lo abandonaron horas después por una contraofensiva de los hutíes.
La ofensiva contra la ciudad portuaria comenzó hace una semana, a pesar de los esfuerzos de la Organización de la Naciones Unidas para evitar la afectación de unos 600.000 civiles que habitan la zona.
Al Hudeida es la segunda ciudad más grande que dominan los hutíes y es de gran importancia para ellos porque a través de su puerto entra cerca del 70 por ciento de las importaciones de comida, suministros básicos y militares destinadas a las zonas rebeldes.
Los rebeldes chiíes, que cuentan con el respaldo de Irán, conquistaron a finales de 2014 amplias áreas del norte y el oeste del Yemen, y entonces expulsaron al gobierno del presidente Abdo Rabu Mansur Hadi de la capital.
La batalla de Al Hudeida ya se considera como la mayor del conflicto desde el inicio de la intervención militar árabe, en marzo de 2015, por el número de tropas desplegado por ambos bandos.