Hamás acusó este lunes al fiscal de la Corte Penal Internacional (CPI), Karim Khan, de «comparar a la víctima con el verdugo», por haber emitido órdenes de arresto tanto contra el líder del grupo islamista palestino, Yahya Sinwar, como al primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, por crímenes de guerra.
Las solicitudes se extienden al ministro de Defensa del país hebreo, Yoav Gallant; así como a Mohammed Diab Ibrahim Al-Masri, comandante en jefe del ala militar de Hamás, conocida como las Brigadas al Qassam; e Ismail Haniyeh, jefe del buró político de Hamás.
Khan considera a los líderes del grupo islamista “penalmente” responsables de “crímenes de guerra y lesa humanidad” cometidos en territorio de Israel y el Estado de Palestina desde al menos el 7 de octubre de 2023, lo que incluye “el asesinato de cientos de civiles israelíes” en ataques perpetrados por Hamás y otros grupos armados, así como “la toma de al menos 245 rehenes”.
Asimismo, el fiscal pide dos órdenes de detención contra gobernantes israelíes, Netanyahu y Gallant, por crímenes de guerra y lesa humanidad cometidos “en el territorio del Estado de Palestina (Franja de Gaza) desde al menos el 8 de octubre de 2023”, es decir, el día posterior al ataque de Hamás a Israel y fecha del inicio de la actual guerra israelí en Gaza.
Entre los crímenes de los que responsabiliza a ambos funcionarios israelíes está el uso del hambre como “método de guerra” contra los civiles y el “asesinato intencionado”, al «dirigir ataques contra una población civil como crimen de guerra».
A través de un comunicado, la formación islamista, que gobierna la Franja de Gaza desde 2007, condenó fuertemente la solicitud de órdenes de arresto solicitada por el fiscal de la CPI.
«Condenamos enérgicamente los intentos del fiscal de la Corte Penal Internacional de comparar a la víctima con el verdugo emitiendo órdenes de arresto contra varios líderes de la resistencia palestina, sin base legal», señalaron en el texto.
Indicaron que la decisión del persecutor de la Haya viola «tratados y resoluciones internacionales que otorgaron al pueblo palestino y otros pueblos del mundo bajo ocupación el derecho a resistir la ocupación en cualquier forma, incluida la resistencia armada», como especifica el artículo 51 de la Carta de Naciones Unidas.
A juicio de Hamás, las ordenes de detención contra Netanyahu y Gallant, por el genocidio y los crímenes de guerra y lesa humanidad perpetrados contra el pueblo palestino, deberían haber llegado hace siete meses.
El grupo instó a la CPI a emitir más órdenes contra «todos los criminales de guerra, incluidos líderes de la ocupación, oficiales y soldados que participaron en esos crímenes».
Durante mas siete meses de constantes bombardeos y bloqueo humanitario, las fuerzas militares israelíes han provocado la muerte de más de 35.500 palestinos -más del 70 % mujeres y niños-, de acuerdo a cifras avaladas por la ONU. Además han dejado un saldo de 80.000 heridos y alrededor 10.000 cuerpos atrapados bajo los escombros.
Adicionalmente, por casusa del asedio implantado por el gobierno de Netanyahu, casi toda la población gazatí se encuentra desplazada, con falta de medicinas, alimento y agua potable.
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