Dos niños resultaron heridos de bala la noche de este miércoles cuando la policía croata disparó contra una furgoneta que transportaba a 29 refugiados de Irak y Afganistán que se saltó un control fronterizo entre Bosnia y Croacia, informaron hoy fuentes policiales.
Los menores, una niña y un niño, ambos de 12 años de edad, sufrieron heridas de bala en sus caras y fueron hospitalizados en la ciudad de Zadar, cerca de donde se produjo el tiroteo, y su vida no corre peligro, según la agencia Hina, que cita a fuentes policiales.
En total, 15 de los 29 ocupantes de la furgoneta eran menores de edad.
Ese medio asegura que los agentes abrieron fuego cuando el conductor del vehículo ignoró las advertencias y aceleró hacia el control establecido por la policía en la carretera.
Según la policía, la furgoneta ya se había saltado previamente otros dos controles.
Al detenerse el vehículo, el chófer huyó al bosque cercano y la Policía encontró en la furgoneta a 29 inmigrantes ilegales, incluidos los dos niños heridos por los disparos.
Varias personas, heridas por el rápido y abrupto movimiento del vehículo, fueron atendidas en el hospital de Gospic.
Bosnia-Herzegovina se ha convertido en una nueva alternativa para muchos refugiados que huyen de conflictos en Oriente Medio y África hacia Europa Central.
Las autoridades bosnias han registrado en lo que va de año la llegada de 4.870 inmigrantes, según datos del Ministerio de Seguridad, un 549 % más que en todo 2017.
La mayoría de los inmigrantes intentan pasar desde el oeste de Bosnia a Croacia, y de allí a Eslovenia, el país más cercano de la zona Schengen, de libre circulación en la Unión Europea.