La Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ) confirmó que está recopilando la información
La operación militar que emprendió Turquía en Siria, denominada Fuente de Paz, deja innumerables daños, muertes y heridos.
Aunque este jueves el Gobierno de Ankara pactó con Estados Unidos una tregua por 120 horas para que se retiren las tropas kurdas del norte del país árabe, ahora ronda la interrogante sobre lo que podría significar una grave violación a los derechos humanos.
Este viernes, la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ) confirmó que investiga el posible uso de fósforo blanco, un producto químico prohibido por la Convención sobre Armas Químicas, en la arremetida turca en territorio sirio.
La organización indicó que “estaba al tanto de la situación y está recopilando información sobre posible uso de armas químicas”.
Las acusaciones las lanzaron el jueves las milicias kurdo-sirias, pero la OPAQ aclaró que no se ha confirmado que esa información sea cierta.
Por su parte, la ONU indicó este viernes que la situación en la mayoría de las zonas del norte de Siria, tras la suspensión de Fuente de Paz, es tranquila.
«La Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios declaró que la situación es tranquila en la mayoría de las zonas, salvo Ras al Ain, donde hoy se informó de nuevos bombardeos (…) Los informes de nuestros colegas humanitarios llegan de fuentes fidedignas sobre el terreno», dijo a los periodistas Stéphane Dujarric, el portavoz del secretario general de la ONU.
Fuentes: HispanTV, Sputnik.