Bagdad aclaró en un comunicado que no dio permiso a los soldados estadounidenses para permanecer en la nación de forma indefinida
El Gobierno de Irak no quiere que las tropas de Estados Unidos, que se están retirando de Siria, permanezcan en su territorio. Por eso, dio un plazo de cuatro semanas para que los soldados estadounidenses salgan del país.
Desde que Washigton anunció su retirada de Siria e informó que enviaría esos contingentes a Bagdad, surgió la duda de si contaba o no con el aval de la administración de esa nación.
Este miércoles, el ministro de Defensa iraquí, Nayah al-Shamari, subrayó que esas tropas están sólo «en tránsito» y que después se dirigirán a Kuwait, Catar o retornarán a EE. UU.
La información la ofreció a los medios después de que se reuniera con el secretario estadounidense de Defensa, Mark Esper, en la capital de Irak.
La «confusión» sobre la permanencia de las tropas estadounidenses la generó el mismo Esper, quien indicó el martes que sus soldados en retirada del noreste de Siria serían reubicados en el oeste de Irak para ayudar a participar en las operaciones contra el grupo terrorista ISIS (Daesh, en árabe), reseñó HispanTV.
Luego, el Comando de Operaciones Conjuntas iraquí denunció que esas fuerzas no tienen permiso para permanecer de forma permanente en el territorio de Irak. Por esta razón, Esper viajó hasta Bagdad para tratar el tema.
Los militares estadounidenses ya se han retirado ―después de que así lo anunciara el pasado 7 de octubre el presidente Donald Trump― de la mayoría de sus bases en las gobernaciones sirias de Alepo, Al Hasaka y Al Raqa, una invasión que comenzó en 2014 con el pretexto de la lucha contra ISIS.
Fuentes: Sputnik, HispanTV.