Un bus repleto con soldados iraníes fue blanco de un ataque terrorista el miércoles pasado en el sureste de Irán, cobrando la vida -según algunas versiones- de más de 40 efectivos de la Guardia Revolucionaria de ese país.
El vehículo se desplazaba «por una carretera entre Zahedan y Khash, no muy lejos de la frontera paquistaní… El grupo yihadista Jaish al-Adl emitió un comunicado atribuyéndose el atentado», informó el portal de noticias Antiwar.
El Ministerio de Relaciones Exteriores culpó a EEUU por el hecho, subrayando que el mortal incidente ocurre justo cuando se realiza una cumbre en Varsovia para discutir la «paz» en Medio Oriente adoptando medidas contra Irán.
La República Islámica del golfo señaló que la respuesta al ataque irá más allá de sus fronteras.
Ayer, la Corte Internacional de La Haya resolvió que la ONU sí es competente para dirimir sobre un reclamo iraní que busca recuperar $1.75 mil millones de dólares en fondos congelados por Washington.
«Irán ha afirmado que las sanciones impuestas en mayo por el gobierno del presidente de EEUU Donald Trump infringen los términos del Tratado de Amistad de 1955 entre ambos países», indicó la agencia Reuters.
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