Dos embarcaciones pequeñas de EE.UU. fueron interceptados hoy por el Cuerpo de los Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI) al penetrar ilegalmente en las aguas de Irán. Es por eso que detuvieron a los 10 militares de la Marina estadounidense que viajaban a bordo, nueve hombres y una mujer.
Según informó el Departamento de Estado norteamericano, los buques entraron a aguas territoriales de Irán «por error” del sistema de navegación. Explicaron que los dos dos barcos se dirigían desde Kuwait hacia Baréin en el marco de una misión de entrenamiento, cuando fueron detenidos en las cercanías de la isla iraní de Farsi en el golfo Pérsico.
El portavoz de La Casa Blanca, Josh Earnest, aseguró que desde Teherán se garantizó que los marineros se encuentran «seguros» y que «pronto se les permitirá continuar su viaje».
El conflicto fue tratado vía telefónica por el secretario de Estado de EE.UU., John Kerry, y su homólogo iraní, Mohamad Yavad Zarif.