Michelle Carter es una joven de 20 años que puede pasar otros 20 entre rejas si una corte del estado de Massachusetts la encuentra culpable en un juicio que ha arrancado este martes. A Carter se le acusa de homicidio involuntario. La razón: textos y llamadas telefónicas que incitaron a su novio, Conrad Roy, a suicidarse cuando tenía 18 años, según el rotativo ‘USA Today’.
El suicidio
En sus últimos días con vida sus amigos y padres trataron de encontrarlo, pero Roy únicamente se relacionó con su novia. Esta tenía problemas de salud mental, una vez fue ingresada al hospital y estaba tomando medicación.
En el julio de 2014 el muchacho fue hallado muerto en el interior de su Ford F-250 en un estacionamiento de un supermercado de Fairhaven, en estado de Massachusetts. Inhaló monóxido de carbono. Y al sentirse mareado salió del vehículo. Cuando Carter lo supo le escribió: «¡Métete de nuevo en el jodido coche!». «Es el momento adecuado y estás listo… hazlo y ya está, nene», continuó. «No más dudas. No hay que esperar», remató la que fuera su novia desde 2012.
Al suicidio a Roy le llevaron al parecer los problemas que tenía en sus relaciones con sus padres. La defensa de la joven llamó la atención del tribunal sobre el hecho de que su novio intentó poner fin a su vida varias veces antes y hasta investigó métodos para realizarlo en la Red. El abogado defensor declaró que Roy «planeó esto durante meses y meses». Pero aún así, según se desprende de la comunicación que mantenía con el fallecido, el adolescente tuvo dudas y sintió miedo por la idea de abandonar a su familia. En la mañana del día del suicidio de Roy, su novia le escribió: «Es necesario hacerlo».
Macabros mensajes
Estos son algunos de los mensajes más aterradores de Carter al que fuera su pareja, según los datos de la Oficina del Fiscal del Condado de Bristol:
«Aquí no eres feliz y jamás lo serás. En el cielo sí que serás feliz. Simplemente hazlo».
«Estás listo y preparado. Todo lo que tienes que hacer es encender el generador y serás libre y feliz».
«Supongo que tus padres saben que estás en un mal momento. No digo que quieran que lo hagas, pero estoy segura de que pueden llegar a aceptarlo».
«Dijiste que tu madre vio una cosa sobre el suicidio en tu computadora y no dijo nada. Creo que sabe que está en tu mente y que está preparada para ello».
«Se ha llegado a un punto en el que no hay nada que alguien pueda hacer para salvarte, ni siquiera tú mismo».
«Tienes que hacerlo, Conrad, o voy a tener que ayudarte»
El «peón» de la «novia en duelo»
La joven le aseguró a Roy que apoyaría a su familia después de su muerte. En este sentido, la asistente del fiscal Maryclare Flynn señaló en el tribunal que Carter «usó a Conrad como un peón» porque pretendía ganar notoriedad pública como una»novia en duelo».
Después del suicidio la muchacha envió un mensaje a la hermana de Roy preguntándole si sabía dónde estaba, como si estuviese al tanto de lo ocurrido. A la Policía le aseguró que intentó avisar a la madre del joven de los planes suicidas del joven, pero no tenía su contacto. Posteriormente, Carter colocó mensajes en las redes sociales en que afirmaba llorar la muerte de Roy. Incluso recaudó fondos en su nombre para evitar los suicidios.
Carter pidió a Roy que eliminase todas sus conversaciones antes de suicidarse. Y a un amigó le confesó (ya después de la muerte de su novio): «Si la Policía lee nuestros mensajes estoy perdida. Su familia me odiará y puedo ir a la cárcel».